La basílica de Hildeguns

LA BASÍLICA DE HILDEGUNS (MACTAR, TÚNEZ)

La basílica de Hildeguns, estudiada por el arqueólogo Noël Duval, constituye un testimonio particularmente notable de la ocupación de Mactar en época vándala. El edificio está precedido por un nártex con tres puertas que jalonan la fachada. En el centro se sitúa un baldaquino cubierto por una cúpula que marca la entrada principal, abierta a una nave tripartita. A ambos lados, la nave central está separada de las laterales por columnas geminadas coronadas por arcos de medio punto. Aunque la planta y la parte inferior del alzado se encuentran en buen estado de conservación, no disponemos de información sobre las partes superiores. Por ello, las soluciones propuestas en este modelo se inspiran en las que pueden observarse en un conjunto de edificios comparables. La altura de la nave central es ligeramente superior a la de las laterales, para dar cabida a una serie de pequeñas oberturas que habría bajo la techumbre.

Nuestra propuesta muestra un nártex tripartito en la fachada, que se distingue por su cubierta plana. Esta solución permitió integrar el baldaquino con su cúpula sobre una plataforma, restaurada por N. Duval, que, en un primer momento estaba ubicada fuera de la basílica. Una estructura similar se ha conservado en la basílica cristiana de san Pedro en El Kef. La sección transversal permite mostrar todo el edificio, desde la fachada principal hasta la distribución interna, caracterizada por las dos hileras de columnas geminadas que dividen la nave y conducen al coro, cubierto por una bóveda de cañón. Ante la ausencia de evidencias de decoración pintada o mosaicos mirales, cuya presencia era muy probable, hemos preferido dejar las paredes blancas.

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