Categorías
Uncategorized

Los postdocs nos despedimos

Hace ya tres años que empezamos como investigadores postdoctorales en el proyecto ATLAS. Desde entonces, uno de nuestros cometidos ha sido escribir mensualmente en este blog y ahora estamos redactando el penúltimo post sobre nuestra experiencia en el proyecto y los planes para el futuro.

Reuniones de equipo y visitas a ciudades y yacimientos
Pero empecemos por el principio, en abril de 2021. Como todos recordamos, por entonces estábamos todavía en plena pandemia y era imposible viajar. Así que la primera reunión del equipo central de ATLAS fue digital. Ambos recordamos estar un poco nerviosos, también por saber qué idioma usaríamos en el proyecto. ¿La reunión sería en francés o en castellano? ¿Y cómo serían los nuevos compañeros? Lo cierto es que ya habíamos coincidido antes en el mundo académico de los congresos, pero trabajar juntos es otra cosa. La reunión, en castellano, fue realmente bien y ya planeamos la próxima reunión presencial en La Rochelle. Como ya escribimos entonces, esta reunión en La Rochelle fue una manera fantástica y, a la vez, dadas circunstancias sanitarias todavía existentes, algo extraña de conocernos. Pero comer sushi en la habitación del hotel y la deliciosa cena en casa de Laurent, ya que los restaurantes estaban todavía cerrados, realmente sirvieron para reunir al equipo y romper el hielo. Así que, en un mes, empezamos ya con muy buen pie.
Además de en La Rochelle, el núcleo de ATLAS se ha ido reuniendo en varios puntos de la geografía mediterránea, especialmente para conocer de primera mano algunas de las ciudades de nuestros casos de estudio. Así, en septiembre de ese mismo año, pudimos organizar una visita a Mérida, para reunirnos también con algunos de los colegas del proyecto, reconocidos especialistas de la historia y la arqueología de esta ciudad. Este encuentro fue esencial para solicitar y obtener los permisos y datos necesarios para elaborar las reconstrucciones 3D para nuestra exposición. Y, a la vez, gracias a nuestros colegas emeritenses, pudimos disfrutar de detalladas explicaciones sobre algunos de los edificios más destacados de la ciudad tardoantigua, así como de las magníficas piezas e inscripciones conservadas en el Museo Nacional de Arte Romano.

Visita a Mérida en setiembre de 2021.

Nuestra siguiente reunión de equipo fue ya en marzo de 2022, y en la orilla meridional del Mediterráneo. Esta vez los cuatro viajamos a Túnez, donde nos encontramos con nuestros colegas del Institut National du Patrimoine, con quienes también acordamos los permisos y la transmisión de datos para continuar trabajando en nuestra exposición itinerante. Allí pudimos pasear entre los fascinantes vestigios arqueológicos de la antigua Cartago, pero también visitar otros yacimientos como Mactaris, incluido en los casos de estudio del proyecto, u otros de gran interés, como Zama Regia. Nuestros colegas tunecinos fueron sin duda unos anfitriones y guías excelentes, y hasta nos llevaron a saborear la verdadera gastronomía local en el corazón de la medina de Túnez.

Visita a Túnez en marzo de 2022.

En diciembre de 2022, Sabine y Pieter presentaron una comunicación en el congreso Africa Romana (el artículo, del que también es co-autor Stefan Ardeleanu, debería publicarse en breve!). El congreso tuvo lugar en Sbeitla, lo que una vez fue la ciudad romana de Sufetula. Así que tuvimos la oportunidad de conocer otra fantástica ciudad africana, aunque no sea uno de nuestros casos de estudio. Pero, por suerte, pudimos hacer la autopsia de una ciudad que sí se incluye en nuestro proyecto, ya que dentro del programa del congreso estaba prevista la visita a Ammaedara. Esta visita no sólo nos permitió pasear entre los vestigios de la antigua ciudad, sino que también pudimos hablar con los dos investigadores más relevantes de este yacimiento: François Baratte y Mohamed ben Nejma. Sabine aprovechó la ocasión para plantear a François Baratte sus preguntas más acuciantes sobre el yacimiento. Mientras que el contacto con Mohamed ben Nejma propició su visita al Centro RomanIslam de Hamburgo, donde él y Pieter colaboraron en la creación del mapa de Ammaedara en la Antigüedad tardía.

Sabine Panzram y François Baratte en Ammaedara en diciembre de 2022.

Estudiando la Antigüedad tardía
Pero más allá de estas visitas y reuniones de equipo, obviamente nuestro trabajo principal ha sido el estudio del fenómeno urbano en la Antigüedad tardía a través de nuestros diez casos de estudio. Ya hemos explicado en otros posts cuál ha sido nuestra manera de trabajar y cómo hemos ido incorporando la enorme cantidad de información epigráfica y arqueológica en nuestro particular Sistema de Información Geográfica en formato web y acceso abierto (WebSIG). Sin duda este exhaustivo trabajo nos ha permitido ampliar exponencialmente nuestro conocimiento sobre este período tan complejo a la vez que interesante, y además ampliar nuestro foco geográfico a regiones sobre las que no habíamos tenido la oportunidad de trabajar directamente con anterioridad. Ahora podemos decir que manejamos con soltura la bibliografía existente y conocemos bien la historiografía y el estado de la cuestión de nuestros casos y regiones de estudio. Además, al trabajar conjuntamente una especialista en arqueología y un especialista en epigrafía, hemos podido combinar estos dos campos y reunirlos en el WebSIG de una forma que nunca antes se había hecho. Si bien este enfoque interdisciplinar es el objetivo de la mayoría de los proyectos, a menudo no va más allá de que un especialista lea las fuentes de otras disciplinas. En este caso, Ada y Pieter no sólo han trabajado juntos sino que han debatido cuestiones desde distintos puntos de vista, lo que ha dado lugar a nuevas perspectivas y ha planteado cuestiones que, por el momento, parecen irresolubles (por ejemplo, las problemáticas de datación en la arqueología y la epigrafía; es decir, el embrollo de la argumentación circular…).

El grupo Epigrafía durante una de sus reuniones.

Así que los postdocs hemos estado efectivamente trabajando juntos, pero no ha sido el único trabajo en equipo que hemos realizado, ya que también contamos con los diferentes grupos de investigación. Estos grupos, compuestos por personas de múltiples procedencias y con especializaciones diversas, se han reunido periódicamente para debatir y profundizar en el estudio de temáticas específicas. Vale, el grupo de epigrafía no es tan interdisciplinar, ya que simplemente lo forman los epigrafistas del proyecto, pero aquí se encuentra la otra novedad del proyecto: reunir a hispanistas y africanistas. Al estudiar estas dos regiones de manera conjunta podemos observar algunas similitudes sorprendentes y diferencias apasionantes. Obviamente, esta combinación de personas con distintos conocimientos y formaciones también ha dado lugar a interesantes intercambios interculturales. Nos ha abierto los ojos a nuevas perspectivas y puntos de vista cambiantes, además de propiciar debates fruto de nuestras diferentes formas de trabajar. A veces ha sido necesaria cierta diplomacia para continuar. No obstante, esta forma de trabajar internacional, intercultural e interdisciplinar es muy gratificante y esperamos continuar colaborando con nuestros colegas.

Workshops anuales
La clave de estas colaboraciones han sido, sin duda, los grupos de investigación que formamos tras nuestro primer coloquio en Madrid. Con ocho grupos de distintos tamaños, dependiendo de la popularidad de cada tema, hemos contado con una treintena de investigadores participando en nuestro proyecto. Pero como la mayoría de ellos tienen sus propios proyectos sobre las ciudades estudiadas, o sobre los temas de los grupos de investigación, no siempre ha resultado sencillo encontrar tiempo para reunirse en sus apretadas agendas. Así que una buena manera de organizarse han sido los workshops anuales, que han marcado un plazo estricto a la vez que han ofrecido a cada grupo la oportunidad de presentar y debatir el trabajo en curso. Es cierto que, a pesar de los amplios plazos de tiempo, no siempre hemos conseguido organizarnos de la manera más eficaz, pero aun así los grupos han planteado en cada coloquio anual interesantes propuestas y cuestiones que han animado nuestros debates. ¡Estamos seguros de que nuestro próximo coloquio en Madrid abrirá también intercambios fascinantes sobre las ciudades de la Antigüedad tardía!

Foto de grupo de nuestro último coloquio en Túnez.

Todas estas reuniones de grupo y coloquios anuales han sido un trabajo a fuego lento del que veremos sus frutos próximamente. Como os hemos explicado anteriormente, estas colaboraciones y debates colectivos serán recogidos en una publicación, el Companion de ATLAS. En los últimos meses el trabajo en este sentido ha sido intenso y los grupos han estado más activos que nunca redactando los diferentes capítulos que conformarán este volumen. Además, Pieter ha estado elaborando, aconsejado por nuestros especialistas y ayudado por los estudiantes de Hamburgo, los múltiples mapas que van a acompañar los textos y que sin duda van a ser uno de los principales outputs de nuestro proyecto. Si tenéis curiosidad, podéis encontrar ya algunos interesantes mapas en nuestra sección Maps-to-go. Y sobre el desarrollo de nuestro Companion seguiremos informando a través de nuestras redes sociales, así que ¡no dudéis en seguirnos si no lo habéis hecho ya!

Cafés y blogs
Junto a todo esto, Pieter y Ada decidieron ya al inicio del proyecto que sería una buena idea reunirse semanalmente, sobre todo teniendo en cuenta que ATLAS tiene diferentes sedes y cada uno trabaja en una distinta. Así que desde entonces cada semana hemos organizado lo que llamamos “cafés virtuales”, durante los cuales sobre todo hemos planificado y preparado el contenido para nuestras redes sociales y el blog. La organización en este sentido ha sido clave y por supuesto no han faltado extensas hojas de cálculo compartidas donde hemos ido añadiendo semana a semana las ideas para X (en su día todavía Twitter) o nuestra página web. Y aunque es cierto que la cantidad de trabajo que requieren estas formas de difusión científica es bastante elevada, es igualmente divertido pensar en cómo podemos llegar hasta vosotros, nuestros lectores y miembros del proyecto. Además, estos cafés semanales nos han permitido charlar de manera más distendida, con un café (o té) entre las manos, sobre el proyecto y, también, sobre nuestros planes para el futuro.

Pieter y Ada durante su presentación en el workshop de La Rochelle.

Planes para el futuro
Trabajar en este proyecto internacional nos ha enseñado mucho. Por supuesto, una barbaridad sobre la Antigüedad tardía, pero también muchísimo sobre intercambios culturales y habilidades sociales. Para empezar, ha sido una bonita experiencia ver cómo cuatro tradiciones académicas diferentes (española, francesa, alemana y tunecina) se unían y sacaban lo mejor que cada una tenía que ofrecer. Con este nuevo bagaje hemos estado y estamos buscando futuras oportunidades. Ada tiene algunas ollas en el fuego, crucemos los dedos para que alguna salga adelante. Pieter dejará el mundo académico para enseñar latín en la escuela de la ciudad holandesa donde vive con su familia. Sin embargo, uno no deja ATLAS sin más… Estamos seguros que en el futuro veréis nuevas publicaciones o mapas sobre la Antigüedad tardía en España y Túnez firmados por nosotros. Y también hay rumores de un ATLAS 2.0, así que esto no es un adiós sino un ¡hasta luego!


Categorías
Uncategorized

A toda máquina: congresos y publicaciones

Lo hemos vuelto a hacer, un año más seguimos con nuestra más consolidada tradición y este está siendo otro otoño lleno de congresos de punta a punta del mundo. Y esta vez, además, lo conjugamos con la preparación y redacción de los distintos capítulos para nuestro Companion. El curso ha empezado fuerte, ¡pero venimos con las pilas cargadas!

La temporada de reuniones científicas se inició en setiembre con la conferencia The Global and Local Economies of the Early Middle Ages, que tuvo lugar en Tübingen y en la cual Sabine participó con una interesante comunicación sobre las economías imperiales y post-imperiales en el estrecho de Gibraltar. Este mes dio comienzo también el taller de QGIS impartido por Pieter para la Universidad de Río de Janeiro y sobre el que os hemos ido contando a través de nuestras redes sociales. La última sesión fue a inicios de octubre y el feedback ha sido tan positivo que ya se está organizando la próxima edición. Pieter cerró también el mes de setiembre con su participación en un congreso en Limoges, donde presentó su propuesta sobre las pequeñas ciudades monumentales como meros centros de representación sin habitar.

Laurent y Ada durante sus respectivas presentaciones en el workshop de Sevilla.

A principios de octubre Laurent y Ada coincidieron en un interesante workshop en Sevilla sobre fenómenos traumáticos y crisis en la Antigüedad. Sus presentaciones fueron complementarias, ya que cada uno analizó el concepto de crisis desde dos perspectivas distintas, la de las fuentes escritas y la de la arqueología. Más adelante, Sabine participó en el congreso From Ctesiphon to Toledo: A Comparative View on Early Church Councils in East and West celebrado en Viena. Y, como no podía faltar en nuestro tradicional otoño de congresos, a finales de octubre tuvo lugar el XIV workshop Toletum, en esta ocasión dedicado a la diplomacia hispana entre la República y al-Andalus. ATLAS estuvo representado en dos ocasiones por Isabelle Mossung, quien presentó una ponencia sobre la tabula patronatus, y por nuestro postdoc Pieter, con una comunicación sobre el desarrollo del sistema urbano visto como una forma de diálogo diplomático.

Foto de grupo con los participantes en el XIV workshop Toletum.

Pero no penséis que el otoño de congresos se acaba aquí, ¡todavía quedan unos meses para que llegue el invierno! Así que tanto en noviembre como en diciembre nos esperan unos cuantos coloquios y conferencias en los que tenemos muchas ganas de participar. En noviembre, Pieter presentará una ponencia sobre la latinización de la Península Ibérica. Ese mismo mes, Sabine presenta una ponencia muy ATLAS en el coloquio Crises et résiliences urbaines: «Résister au changement ? Le fait urbain de la péninsule ibérique pendant l’Antiquité tardive». Diciembre comienza con la participación de Pieter en la Universidad Romana para jóvenes en el Thermenmuseum de Heerlen (NL). Sabine y Laurent participarán en el VIII coloquio internacional ATEG en Burdeos para presentar el trabajo del proyecto ATLAS. Después, si todo va bien, ATLAS cerrará el año 2023 con broche de oro: Sabine y Pieter han sido invitados a ir a Brasil para formalizar una colaboración entre las universidades de Hamburgo y Río de Janeiro. Crucemos los dedos para que los sistemas burocráticos funcionen debidamente y puedan ir. Como siempre, os seguiremos informando con mayor detalle a través de nuestras redes sociales, así que ¡no dudéis en seguirnos!

Y, en paralelo, el conjunto de ATLAS sigue a toda máquina preparando la publicación final en forma de Companion. Nuestros grupos de investigación han vuelto a sus reuniones periódicas tras el verano, para poner en común las ideas y establecer las líneas de trabajo para la redacción de sus correspondientes capítulos. ¡Tenemos muchas ganas de que podáis ver el fruto de todos estos años de trabajo!


 

Categorías
Uncategorized

Trabajar en España y Túnez

Llevar a cabo un proyecto de investigación en y sobre dos países distintos es, a la vez, un reto y una experiencia estimulante. Nos ayuda a conocer la historia de dos lugares con culturas diferentes y aproximarnos a su propia idiosincrasia, lo cual sin duda enriquece nuestro bagaje tanto en el plano profesional como en el personal. De hecho, como habéis ido viendo a lo largo de estos años, ATLAS nos está permitiendo trabajar no sólo en dos países distintos, sino con un buen número de instituciones, equipos de investigación y especialistas diferentes.

Investigar en dos países distintos

Como sabéis, gran parte de nuestra investigación se ocupa del análisis del patrimonio histórico y arqueológico, donde se incluyen entre otros epígrafes, vestigios arquitectónicos e infraestructuras, y elementos topográficos de las ciudades tardoantiguas. Por este motivo, especialmente cuando necesitamos información directa sobre estos elementos, debemos dirigirnos a las diferentes administraciones e instituciones encargadas de la gestión y preservación, así como de la difusión de dicho patrimonio. Y, por supuesto, cada país (y cada región) tiene sus propias instituciones y maneras de funcionar. Así que conocer los procedimientos de cada una de ellas es fundamental en un proyecto internacional como el nuestro, ya que no sólo agiliza los trámites necesarios sino que también permite establecer lazos de reciprocidad al devolver el conocimiento generado a las instituciones y sociedad de origen.

En nuestro caso concreto, en Túnez hemos trabajado de la mano del Institut National du Patrimoine, principal organismo encargado de velar por el patrimonio histórico-arqueológico del país. En España, en cambio, la gestión está menos centralizada y en cada región y ciudad nos hemos dirigido a las instituciones correspondientes. Algunas ciudades incluso cuentan con más de un organismo trabajando en el ámbito patrimonial, como Mérida, donde confluyen el Instituto Arqueológico de Mérida, el Consorcio Ciudad Monumental de Mérida y el Museo Nacional de Arte Romano.

Foto de grupo en el INP durante nuestro último encuentro en Túnez.

Pero, además, una buena parte de los yacimientos arqueológicos que examinamos en nuestro proyecto han sido también objeto de campañas y estudios de distintos equipos internacionales. Probablemente el caso más evidente sea el de Cartago, donde la campaña internacional “Save Carthage” iniciada en los años 70 trajo consigo la llegada de grupos de investigación procedentes de muchos países distintos. Estos equipos no sólo realizaron excavaciones arqueológicas en varios puntos de la ciudad antigua, sino que muchos publicaron igualmente los resultados de sus estudios. En consecuencia, estos resultados se encuentran recogidos en un gran número de monografías, capítulos y artículos, a menudo dispersos, que debemos reunir para nuestra propia investigación. Un caso similar lo encontramos en Baelo Claudia. Este yacimiento gaditano tiene un estrecho vínculo con Francia y la Casa de Velázquez, dado que el fundador de l’École des hautes études hispaniques, Pierre Paris, inició las primeras campañas arqueológicas propiamente dichas en este lugar. Pero desde entonces, muchos otros equipos han trabajado en esta ciudad romana costera, como la Universidad de Cádiz, la Universidad de Sevilla o la Universidad de Aachen.

Es por ello que, además de contactar con las distintas instituciones encargadas del patrimonio, en otras ocasiones nos dirigimos también a los propios equipos e investigadores que han dirigido las excavaciones y estudios de aquellos elementos de los que necesitamos datos más concretos. Este es el caso de la magnífica iglesia de Damous-el-Karita, que fue recientemente excavada por el equipo austríaco de Heimo Dolenz, la epigrafía cristiana de Cartago estudiada exhaustivamente por Liliane Ennabli y Sihem Aloui, las múltiples campañas realizadas en Leptiminus por la Universidad de Michigan, o las excavaciones del Área arqueológica de Morería dirigidas por Miguel Alba.

La realidad arqueológica

Otra diferencia interesante que encontramos, casualmente, en nuestras ciudades caso de estudio es la continuidad habitativa. Cartagena, Córdoba, Mérida y Sevilla se han desarrollado sobre las ciudades romanas de origen; es decir, son centros urbanos con una continuidad ocupacional con siglos de historia. Como contrapartida, sin embargo, sólo podemos conocer de manera bastante parcial los vestigios antiguos, lo cual complica la investigación arqueológica. Además, las excavaciones suelen llevarse a cabo únicamente cuando se realizan obras de construcción o reparación de los edificios de la ciudad actual. De modo que acabamos teniendo pequeñas ventanas de conocimiento arqueológico dentro del entramado urbano, en algunos casos con los vestigios conservados y visibles y en otros simplemente documentados y cubiertos de nuevo por las construcciones contemporáneas. El lado positivo, en cambio, es que las excavaciones suelen ser de zonas relativamente pequeñas que permiten documentar siglos de evolución urbana. Por supuesto, esto significa que los restos arqueológicos a menudo se encuentran en estratigrafías complejas, con metros de extensión, debido al uso y reutilización de las estructuras precedentes.

Parte del equipo de ATLAS paseando por el Área arqueológica de Morería en Mérida.

Dicho esto, se podría pensar que los yacimientos tunecinos de nuestro proyecto, los cuales no tienen ciudades contemporáneas por encima, son más sencillos de analizar. Y, efectivamente, a menudo tenemos una imagen más completa del entramado urbano de estas antiguas ciudades. Además, podemos visitarlas y hacernos una buena idea de los edificios y las relaciones entre éstos y el resto de infraestructuras urbanas. 
Fotografía del foro de Mactaris durante nuestra visita en marzo de 2022.
Sin embargo, estos yacimientos presentan sus propios desafíos. En primer lugar, no están completamente abandonados, ya que a menudo las nuevas ciudades se sitúan en puntos muy cercanos al yacimiento en cuestión. Este es el caso de Cartago, ubicado entre Túnez y Sidi bou Saïd; Ammaedara, localizada al este de la actual Haïdra; o Lamta, junto a la antigua Leptiminus. Tal vez Mactaris se asemeje más a los casos españoles de continuidad habitativa, dado que está envuelta por la moderna Makthar. Aun así, no siempre esta proximidad de ciudades actuales es buena para la preservación de los yacimientos arqueológicos. Por una cuestión obvia de minimización de esfuerzos y recursos, es muy habitual que los asentamientos abandonados se usen como cantera, teniendo como resultado la presencia de numerosos materiales antiguos (spolia) en las ciudades de los alrededores. De modo que, por ejemplo, la información epigráfica de estos yacimientos es muy problemática. En efecto, se ha conservado un gran número de inscripciones, pero rara vez conocemos su contexto.

Otra desventaja de los yacimientos despoblados es que se ven más expuestos a las inclemencias y al paso del tiempo. Así, la erosión no sólo afecta a la conservación de los edificios sino también de la estratigrafía, especialmente de las capas superiores donde se encuentran los vestigios de periodos más recientes (¡y eso incluye nuestra querida Antigüedad tardía!). A ello hay que sumarle, tanto en los yacimientos despoblados como en las ciudades vivas, la realización de intervenciones sin metodología arqueológica. Si bien el problema en los yacimientos despoblados es que este tipo de intervenciones, que se remontan a épocas en que la arqueología no se había desarrollado como disciplina, pueden afectar a una mayor extensión de la ciudad antigua. Por ejemplo, en Baelo Claudia, nuestro único caso de estudio despoblado en España, contamos con diarios de excavación antiguos en que se explicita que sacaron decenas de tierra del foro de la ciudad. El motivo de esta abundante extracción de tierra es el interés por sacar a la luz los edificios monumentales de época romana altoimperial, en detrimento de otros períodos históricos. Aunque, afortunadamente, esta es una práctica ya obsoleta y a día de hoy contamos con un gran volumen de información de la evolución urbana tardoantigua incluso en las áreas más monumentales de la ciudad.

Plano de la ocupación tardoantigua en el templo de Isis de Baelo Claudia (Dardaine et al. 2008, fig. 27).

A pesar de las diferencias, o quizá debido a ellas, tenemos un trabajo interesante. Resulta divertido e intelectualmente estimulante considerar cómo las diferencias entre nuestros estudios de caso repercuten en la representación de la Antigüedad tardía. Además, es sin duda un ejercicio importante para un proyecto como ATLAS, ya que nos permite comprender mejor el desarrollo de las narrativas historiográficas sobre nuestro periodo de estudio.


Categorías
Uncategorized

Trabajar en un proyecto plurilingüe

Como habréis notado, nuestro blog se publica en tres lenguas: castellano, francés e inglés. ¿El motivo? La naturaleza políglota de ATLAS. Pero tal vez os preguntáis por qué hemos optado por hacer de nuestro proyecto un espacio plurilingüe en vez de limitarnos a usar la lengua “internacional” (es decir, el inglés). Lo cierto es que hay varias razones por las cuales trabajamos en varios idiomas. La más obvia es el origen y financiación del proyecto, que procede de la Agence Nationale de la Recherche (ANR) de Francia y de la Deutsche Forschungsgemeinschaft (DFG) de Alemania. Así sumamos ya dos idiomas con una larga historia en nuestro ámbito de investigación. De hecho, el alemán ha sido siempre una lengua importante y habitual en las Altertumswissenschaften (ciencias de la Antigüedad) desde los inicios de este campo de estudio. No en vano los investigadores a menudo bromean sobre el hecho de que para cualquier temática se puede encontrar una publicación de un autor alemán del siglo XIX. Pero, bromas a parte, no hay duda de que como lengua académica, el alemán mantiene un lugar destacado en la investigación sobre la Antigüedad. No obstante, para cuestiones de difusión usamos el castellano. Esto tiene su razón de ser en una parte igualmente fundamental del proyecto, nuestro interés por dar a conocer y divulgar los resultados del mismo.

Facilitar la divulgación

La imagen de la academia encerrada en su torre de marfil es a menudo una dura realidad y no siempre resulta fácil cambiarla. Podemos sumergirnos tanto en nuestros ámbitos de estudio que acabamos perdiendo de vista qué resulta verdaderamente interesante para el público en general y por qué nos dedicamos a esto más allá de “por amor al arte”. Pero como buena parte de los proyectos están financiados, como el nuestro, con fondos públicos, la difusión y la divulgación del conocimiento son esenciales. Es más, estamos convencidos de que parte de nuestro trabajo también es retornar y ofrecer el conocimiento generado a la sociedad. Y aquí es donde entra el juego el castellano. Como nuestra investigación se centra en el sur de España y en el norte de Túnez, hemos optado por escribir los posts de nuestro blog en castellano y francés, los dos idiomas más ampliamente usados en el mundo académico de nuestro proyecto. Lo ideal habría sido añadir también el árabe en nuestra página web, de modo que pudiéramos llegar a un público más amplio en Túnez y el conjunto de países arabófonos. Sin embargo, nadie en el núcleo del equipo de ATLAS tiene el suficiente conocimiento de esta lengua, lo cual significa que no podemos realizar las traducciones por nosotros mismos. En cambio, hemos optado por usar el inglés como idioma “internacional” y así esperamos llegar a un mayor número de personas, incluso fuera del foco de nuestra investigación, y generar un mayor interés en la historia de la Península Ibérica y el Magreb. En futuros proyectos quizá tengamos que plantearnos destinar parte de la financiación de la divulgación a la traducción de nuestros textos al árabe para poder llegar a más gente.

Multilingüismo en el WebSIG

Otro elemento de difusión de nuestro proyecto es el WebSIG, al que le dedicamos el post del mes pasado para explicar cómo funciona. Y, de nuevo, nos encontramos con otro aspecto multilingüe del proyecto, aunque en este caso con una mezcla algo más evidente. El WebSIG en sí mismo está escrito en francés, los vestigios arqueológicos en castellano y los epigráficos en inglés…

Ejemplos de una ficha arqueológica y epigráfica, donde se usan distintas lenguas.

Durante nuestro primer encuentro en La Rochelle al inicio del proyecto, estuvimos debatiendo la posibilidad de crear una base de datos trilingüe, pero pronto nos dimos cuenta que esto significaba tener tres bases de datos paralelas y que cada ítem debería entonces escribirse tres veces, una por cada idioma. Así que como nuestro objetivo era completar la base de datos antes de marzo de 2024, esta posibilidad dejó de ser una opción. De modo que decidimos que lo mejor sería usar el francés, castellano e inglés como las lenguas académicas del proyecto y también de la base de datos. Por este motivo, como habréis observado ya, gran parte de las fichas de carácter arqueológico están redactadas en castellano, ya que están escritas por Ada; mientras que las fichas de carácter epigráfico están realizadas por Pieter en inglés. Ambos escogieron estas lenguas al ser los idiomas en los que se sienten más cómodos. Aunque os pedimos comprensión si os encontráis con algún pequeño error lingüístico, ¡son los gajes de este oficio plurilingüe!

Encuentros políglotas

Puede que esto de mezclar tres idiomas os parezca un poco engorroso y que, de nuevo, os preguntéis por qué no usamos simplemente el inglés. De hecho, probablemente os habréis dado cuenta ya de que tampoco utilizamos esta lengua en los programas de nuestros encuentros anuales. Pero es que lo cierto es que no resulta necesario, porque la gran mayoría de los miembros de ATLAS tienen un muy buen nivel de castellano o francés, lo cual nos permite intercambiar ideas sin ningún tipo de problema.

Instantánea de uno de nuestros debates plurilingües durante el primer encuentro ATLAS en la Casa de Velázquez.

Así que a menudo nuestros debates tienen lugar en dos lenguas a la vez, o bien uno de los interlocutores decide expresarse en el idioma del otro. Naturalmente, esto significa que todos debemos hacer un esfuerzo por comunicarnos y por escuchar pacientemente a los demás, especialmente aquellos que se animan a utilizar una lengua que no es la suya. Pero incluso aquellos que todavía no se sienten con confianza para expresarse en estos idiomas, a menudo tienen un amplio conocimiento de otras lenguas próximas al francés o al castellano, lo cual les permite comprender lo que se dice sin dificultades. Desde luego, esta es una muy buena manera de ampliar nuestro conocimiento lingüístico a la vez que promueve un ambiente de intercambio científico amable y tolerante con todos los colegas, que siempre se muestran dispuestos a facilitar los debates en el idioma que sea. Pero, además, al usar estos idiomas también facilitamos la comprensión a aquellos oyentes de Túnez o España que deciden asistir a nuestros encuentros.

Pieter, Marc y Sabine son algunos de los miembros que combinan hasta tres lenguas durante sus conversaciones.

Esto es en lo que se refiere a los encuentros científicos, pero lo que sucede en los intercambios de carácter más informal es todavía más interesante. En estos casos hablamos todavía más lenguas y, sí, el inglés es una de ellas. Como decíamos, en ocasiones nos encontramos con una comprensión pasiva gracias al conocimiento de otras lenguas, lo cual  da pie a curiosos y divertidos triángulos lingüísticos. Tres de nuestros miembros, por ejemplo, suelen alternar el francés, el alemán e ¡incluso el neerlandés!

Pero ¿funciona?

Estamos convencidos de que este sistema multilingüe de comunicación funciona perfectamente bien. Hasta ahora todos nuestros encuentros han dado pie a debates productivos entre los distintos colegas. Y cuando nos encontramos con límites en nuestros conocimientos lingüísticos siempre podemos utilizar una lengua intermedia. Además, a la hora de escribir podemos recurrir a los diccionarios de toda la vida o utilizar los equivalentes digitales para facilitar nuestra comunicación plurilingüe.

Los diccionarios son una herramienta fundamental en nuestro proyecto.

El nuestro es, además, un proyecto de ciencias humanas, por lo que el fomento de la riqueza lingüística es un valor que llevamos como bandera. Pero, en cualquier caso, podéis juzgarlo por vosotros mismos, asistiendo a nuestros encuentros científicos o bien a través de nuestra próxima publicación bilingüe (FR-ES), el Companion sobre urbanismo en la Antigüedad tardía.


 

Categorías
Uncategorized

El WebSIG de ATLAS: ¿qué es y cómo funciona?

Como habréis leído en varios de nuestros posts, en ATLAS trabajamos con un WebSIG. Todavía mejor, con un WebSIG de acceso abierto, por lo que podéis ver cómo trabajamos ¡en directo! Aunque recoger la información, redactarla y adaptarla al formato del WebSIG requiere de tiempo y, además, es sólo una parte de nuestro trabajo. Pero, en cualquier caso, hoy os vamos a explicar qué es el WebSIG, cómo trabajamos en él y cómo funciona, ya que cuenta con varias características y particularidades que merecen ser recogidas con mayor detalle en un post específico.

Introducción al WebSIG

Empecemos por una breve introducción al WebSIG. Fue elaborado por Frédéric Pouget en la Université de La Rochelle y es un buen ejemplo de la utilización de las estructuras universitarias existentes dentro de un proyecto. El desarrollo del WebSIG formaba parte de un curso impartido por Frédéric, en el que los estudiantes debían construir la base de datos como parte de sus tareas. De este modo obtuvimos nuestra base de datos, mientras que los estudiantes adquirieron la experiencia necesaria en esta materia y ahora pueden ver su trabajo en acción, lo cual es mucho mejor que realizar una tarea por el simple hecho de realizarla. 

Nuestra base de datos se aloja en el servidor Huma-Num del Centre National de la Recherche Scientifique (CNRS). Se trata de una iniciativa del gobierno francés que no podemos más que aplaudir. A diferencia de lo que sucede habitualmente en muchos proyectos, cuyos conjuntos de datos se retiran del servidor online por falta de financiación una vez finalizados, Huma-Num garantiza el alojamiento permanente de estas bases de datos. De este modo, los investigadores van a poder seguir consultando y utilizando nuestra base de datos mucho después de que finalice la etapa actual del proyecto ATLAS. 

Una de las mayores novedades de nuestro proyecto es la combinación de evidencias arqueológicas y epigráficas en el mismo WebSIG. Por lo general estos datos se encuentran en bases de datos separadas, si es que se encuentran en bases de datos de libre acceso. Combinando ambas fuentes pretendemos comprender mejor la ciudad (evolución, distribución topográfica, usos de los espacios, etc.) y su estructura social. Ambos ámbitos de estudio son muy diferentes y nosotros, tanto Ada como Pieter, trabajamos juntos para sacar el máximo partido de los datos recogidos.

El estudio arqueológico en el WebSIG

Como indicamos al inicio, recopilar, sintetizar y redactar la información de un modo apropiado para el WebSIG es un trabajo que requiere de bastante tiempo. Esto es especialmente cierto en el caso de los vestigios arqueológicos, ya que rara vez disponemos de otras bases de datos a las que podamos acceder y de donde extraer la información. Precisamente una de las grandes aportaciones de nuestro proyecto es esta, reunir una enorme cantidad de información, actualizada y contrastada, sobre el fenómeno urbano en la Antigüedad tardía.

Así que, en el plano arqueológico, la investigación comienza al estilo de lo que podríamos llamar “vieja escuela”, con una búsqueda exhaustiva de las publicaciones más significativas de la ciudad que estemos analizando en ese momento. Esto nos permite hacernos una idea del estado de la cuestión a día de hoy y contar con una bibliografía lo más completa y reciente posible. Dicho así parece una tarea sencilla, pero uno de los principales retos es, de hecho, reunir la información disponible ya que a menudo está dispersa en publicaciones distintas y variopintas, por lo que no siempre resulta sencillo hacerse con toda la bibliografía. Por suerte, siempre podemos contar con nuestros colegas colaboradores en el proyecto para que nos echen una mano en esta tarea.

Ejemplo de ficha de un vestigio arqueológico de Carthago. A la derecha puede observarse el plano de la ciudad con una superposición del plano arqueológico de la misma.

Una vez contamos con una bibliografía lo más completa y reciente posible, es el momento de leerla y analizarla detenidamente para obtener los datos concretos y de interés para nuestro proyecto. Queremos conocer qué edificios, infraestructuras y elementos topográficos conformaban el paisaje urbano de nuestras ciudades de estudio a lo largo de los cinco siglos de la Antigüedad tardía. El análisis se hace vestigio a vestigio, de modo que paralelamente podemos ir sintetizando y redactando la información adaptada al formato del WebSIG. Esta información se recoge, en un primer momento, en un fichero tipo Excel para facilitar la exportación a la base de datos. No obstante, todavía no hemos podido realizar una exportación en bloque de toda esta información, por lo que los ítems se entran por ahora de manera manual. Esperamos poder aplicar un sistema similar al usado en la parte epigráfica para los próximos casos de estudio.

Por último, una vez sintetizada y redactada la información necesaria del vestigio en cuestión (descripción del mismo, estado de conservación y discusión cronológica), realizamos una búsqueda del aparato gráfico para completar la ficha. Fotografías, planos, secciones o reconstrucciones son también incluidas en las fichas de los vestigios arqueológicos no sólo para facilitar la comprensión del mismo, sino también porque esta documentación gráfica sirve también de punto de partida para nuestros colegas encargados de la modelización y reconstrucción 3D para la exposición itinerante de ATLAS.

El estudio epigráfico en el WebSIG

La parte epigráfica del proyecto sigue una aproximación completamente distinta. Gracias a las bases de datos existentes (como Trismegistos, EDH, EDCS, HEpOnl y LatinNow), el análisis de un único ítem a través de múltiples publicaciones no es necesario. Algunas de estas bases de datos son de acceso abierto y permiten a los especialistas descargar la información. En otros casos, en cambio, deben encontrarse otras alternativas… Combinando los datos disponibles a través de las diferentes bases de datos podemos obtener ya un conjunto de datos epigráficos mejorado. Esta combinación es posible gracias a que Trismegistos contiene los ID de la mayoría de las grandes bases de datos, de modo que podemos establecer enlaces cruzados con la información recogida en las distintas bases de datos. Sin embargo, incluso después de combinarlos, a menudo nos quedan datos parciales. Además, y lo que es más importante para nuestro WebGIS, los datos espaciales sólo se ofrecen a nivel de ciudad. Es decir, para Carthago tenemos más de ocho mil inscripciones en la base de datos Claus-Slaby, todas ellas con un centroide representativo (es decir, un único punto en el mapa).

Información epigráfica y espacial de Carthago de la base de datos Clauss-Slaby (https://db.edcs.eu/epigr/imp-rom.html). Debe tenerse en cuenta que se incluyen todos los periodos históricos.

Evidentemente, esta aproximación no resulta nada útil para el estudio de una única ciudad. A menudo los epigrafistas se centran en estudios de casos pequeños y dedican mucho tiempo a buscar la localización exacta de cada una de las inscripciones, pero pocas veces este esfuerzo se refleja en las bases de datos específicas. Pero, en cualquier caso, parte de la mejora de nuestros datos para el WebSIG incluye la mejora de los datos espaciales, así que al consultar las publicaciones buscamos el lugar de hallazgo específico de cada inscripción. De este modo podemos asignar a cada inscripción una localización a nivel de edificio. El mapa de más abajo muestra cómo hemos localizado más de dos mil inscripciones tardoantiguas de Cartago en la ciudad. Las 163 inscripciones que podéis observar en el mar son las que no hemos podido localizar. Por ahora no hemos encontrado una solución satisfactoria al problema de cómo indicar que no disponemos de la localización exacta de ciertos epígrafes. A menudo en estos casos las inscripciones se colocan en una única ubicación, que funciona como punto simbólico (drop site) de esta indefinición geográfica. Así, hemos decidido situarlas en el agua, esperando que resulte evidente que en estos casos la localización es desconocida.

Información epigráfica y espacial mejorada para el periodo tardoantiguo (ATLAS).

A la vez que consultamos las publicaciones epigráficas para detallar la información espacial de las inscripciones, también mejoramos la información sobre el tipo de material, de objeto y texto. Y, sin duda, uno de los aspectos más complejos es el de la datación de los epígrafes. Por otro lado, gracias a la combinación de las bases de datos con las publicaciones de colecciones epigráficas podemos introducir las inscripciones de manera conjunta. Es decir, que la epigrafía no se introduce en la base de datos inscripción por inscripción, sino en grandes bloques. De hecho, en el caso de Cartago todos los epígrafes se incorporaron de una sola vez y pronto terminaremos y subiremos los otros cuatro estudios de caso del Magreb.

¿Cómo se usa el WebSIG?

En primer lugar, podéis acceder a nuestro WebSIG a través del siguiente enlace: https://geoapps.huma-num.fr/adws/app/5b1c0f10-7386-11ec-b348-11e51a07f6b0/ 

La pantalla de inicio puede parecer algo abrumadora al principio, pero precisamente este post quiere servir como guía de uso. ¡Ya veréis como no es nada complicado y rápidamente os hacéis al funcionamiento de la interfaz!

Pantalla de inicio del WebSIG.

En el lado derecho se encuentra el panel con las distintas capas de mapas, que pueden activarse y desactivarse según nos interese. De hecho, en esta primera vista general del mapa sólo podemos ver los territorios (cité) de los diez casos de estudio, pero cuando nos acercamos a una de las ciudades, se activan otras capas. Podemos hacer zoom de distintas maneras. Probablemente la forma más intuitiva sea con el botón de desplazamiento de nuestro ratón, pero el WebSIG ofrece otras dos opciones: (1) mediante los botones + y – situados arriba a la izquierda, junto a ellos las flechas permiten cambiar entre los dos últimos niveles de zoom usados; (2) mediante el último icono de esta columna, una lupa que permite acercarse rápidamente a una zona concreta. Al seleccionar esta función, el icono se activa en azul y permite dibujar una ventana sobre el área a la que queremos acercarnos. En este sentido, debe tenerse en cuenta que el recuadro creado indica el nivel de zoom, de modo que nos mostrará lo que hay dentro de la ventana dibujada. 

Cuando, por ejemplo, nos acercamos a Cartago, podemos observar que cité y enceinte desaparecen, mientras que los iconos de los vestigios arqueológicos aparecen. Las capas epigráficas deben activarse manualmente en el panel de la derecha ya mencionado. En este mismo menú podemos activar y desactivar los distintos mapas de base y jugar con su nivel de transparencia. 

Pasemos ahora al panel de la izquierda. En primer lugar encontramos cuatro iconos, cada uno de los cuales permite buscar y hacer consultas en la base de datos: (1) Filtres Carto Vestiges, indicado con un templo; (2) Filtres Carto Inscriptions, con un monumento similar al anterior; (3) Recherches, cuyo icono es una lupa; y (4) Statistiques, representado por un gráfico. Veamos qué funciones nos ofrecen cada uno de ellos.

Filtres Carto Vestiges

Ésta es una función que nos ofrece dos opciones, aparentemente similares, pero que posibilitan la consulta de la base de datos desde diferentes perspectivas. La primera opción (Recherche Vestige par Ville / Type / Sous-type) ofrece búsquedas dentro de cada ciudad por tipo e incluso subtipo de elemento arqueológico. Lo interesante de esta función es que ninguno de los ítems de búsqueda es obligatorio, por lo que pueden realizarse consultas bastante libres, incluso sin ceñirse a una única ciudad. Así, podemos disponer de una lista de todos los elementos arqueológicos por tipos (cívico, religioso, económico, etc.) o subtipos (iglesias, viviendas, termas, necrópolis, etc.) recogidos en nuestra base de datos. De hecho, los resultados de ésta y todas las demás opciones de búsqueda generan un listado en lado derecho, que puede visualizarse como una tabla y facilita el acceso a las fichas de cada vestigio. Eventualmente, estas tablas podrán descargarse en distintos formatos para trabajar con los datos de la manera que más nos convenga.

Ejemplo de la tabla que puede consultarse tras cualquier búsqueda.

La segunda opción (Recherche Vestige par Ville / Sous-type / Siècle) está enfocada a consultas específicas por siglo, por lo que esta variable es obligatoria al realizar la búsqueda. De este modo podemos filtrar cronológicamente los elementos arqueológicos, además de por ciudad o subtipo si así lo deseamos. Esta es una buena manera de observar patrones evolutivos por categorías concretas de vestigios y/o edificios, tanto en una ciudad concreta como en el conjunto de los casos de estudio del proyecto.

Filtre Carto Inscriptions

La función de búsqueda para la epigrafía tiene cuatro opciones distintas. Podemos buscar en el registro epigráfico con la función Recherche Inscription, que permite acotar las búsquedas utilizando filtros por ciudad, tipo de texto, datación o descripción. Combinando los filtros podemos obtener búsquedas muy detalladas. La Recherche Langue Inscription es bastante sencilla, ya que como su nombre indica selecciona la lengua de las inscripciones. Debe tenerse en cuenta que la búsqueda es exacta, por lo que el latín sólo dará latín y dejará fuera el griego/latín y el hebreo/latín. La Recherche Chronologique Inscription ofrece la posibilidad de trazar un mapa de las inscripciones fechadas en siglos concretos activando y desactivando las capas. En este caso se trata de una búsqueda amplia, es decir, se muestran todas las inscripciones con el siglo mencionado. De modo que, por ejemplo, una inscripción fechada entre los siglos III y V aparecerá en los tres siglos, mientras que aquellas situadas de manera general en la Antiquité tardive sólo se mostrarán con esta capa activada. Finalmente, la Recherche ID Inscription es una forma útil de localizar una inscripción concreta en la que se ha estado trabajando. Por lo que es recomendable recordar el número de ID de la inscripción en nuestra base de datos para consultar fácilmente ese texto.

Por otro lado, aprovechamos para adelantaros que estamos trabajando en más tipos de búsquedas, concretamente para el texto dentro de las inscripciones, basadas en una versión depurada del texto editado y en la búsqueda de referencias. ¡Os mantendremos informados!

Recherches

En esta línea de mejora constante están las distintas funciones de búsqueda que encontramos dentro del icono de la lupa (recherches). En algunos casos, de hecho, han sido sugerencias de nuestros propios colegas del proyecto, como la búsqueda por palabras clave tanto en edificios (Recherche Edifice par mots clés) como en inscripciones (Recherche Inscription par mot clé). Como decíamos, se trata de funciones que estamos todavía desarrollando, pero esperamos poder ponerlas a completa disposición bien pronto. El resto de opciones de búsqueda funcionan como las que hemos explicado ya, tanto en el ámbito epigráfico como arqueológico.

Statistiques

Por último, el panel Statistiques nos ofrece, por el momento, un conjunto de gráficos que permiten tener una idea general de los datos disponibles en el WebSIG, además de comparar nuestros casos de estudio. Por supuesto, como éste es un trabajo en curso, sólo muestra la información que ha sido incorporada a la base de datos. Aun así, es una herramienta útil para observar tendencias evolutivas a nivel cronológico o incluso para conocer, con un vistazo rápido, qué tipos de vestigios caracterizan cada una de las ciudades de nuestro proyecto.

Ejemplo de la distribución por tipos de vestigios arqueológicos en Baelo Claudia.

Próximamente añadiremos esta pequeña guía de uso a la propia interfaz del WebSIG e incluso puede que podamos contar con un pequeño video explicativo en francés. ¡Esperamos que os resulte de utilidad!


Categorías
Uncategorized

Investigación comparativa e interdisciplinar a través de las basílicas de Makthar, Haïdra y Mérida

El proyecto ATLAS se define, como sabéis, por una investigación comparativa e interdisciplinar. Comparativa entre varias regiones y ciudades de estudio, e interdisciplinar por la integración de distintas fuentes y tipos de evidencias. Ya tuvimos la ocasión de presentaros esta metodología hace unos meses. Esta vez volvemos sobre ello con un post dedicado al análisis de un tipo concreto de edificio, las basílicas. Aunque el nuestro no es un estudio exclusivamente arquitectónico, como os podéis imaginar. Estos edificios albergan muchas otras evidencias cuyo análisis nos permite entenderlos de manera global, también como un reflejo de los aspectos sociales y religiosos de la Antigüedad tardía.

Pero empecemos por el principio, ¿qué es una basílica? En época romana las basílicas eran edificios públicos, por lo general ubicados en el área forense de las ciudades y utilizados para múltiples funciones, especialmente para la administración de justicia o bien como lugar de reunión para tratar asuntos de la comunidad cívica. Este es muy probablemente el origen de las basílicas cristianas — o lo que es lo mismo, las iglesias —, que son las que nos interesan hoy aquí. Los cambios sociales, políticos y religiosos que tuvieron lugar durante la Antigüedad tardía llevaron al desuso de las basílicas civiles, pero su tradición arquitectónica y funcional se mantuvo, con ciertas innovaciones, en los edificios que entonces acogían las reuniones de la comunidad (cristiana).

Comparativa de las plantas arquitectónicas de la basílica de Majencio y de la basílica de santa María la Mayor (proyecto original), ambas en Roma (G. Dehio y G. von Bezold, Wikimedia Commons).

En el marco de nuestro proyecto nos hemos encontrado con múltiples basílicas cristianas, algunas mejor conservadas que otras, algunas con más datos epigráficos, otras con más datos arqueológicos. Para el estudio interdisciplinar y comparativo que nos proponemos, precisamos de ejemplos similares para los que contemos con buenos datos, tanto en términos cuantitativos como cualitativos. Por ello nos centramos fundamentalmente en aquellas basílicas que, además de haber sido objeto de estudios arqueológicos específicos, dispongan también un buen volumen de inscripciones accesibles a través de las bases de datos u obras epigráficas de referencia. En concreto, vamos a analizar la basílica llamada de Melléus en Haïdra (Ammaedara), la de Hildeguns en Makthar (Mactaris) y la de santa Eulalia en Mérida (Emerita). Todas ellas cumplen los requisitos expuestos y, además, cuentan con decenas de tumbas y epitafios en su interior o alrededores; es decir, son basílicas funerarias. Esta particularidad nos permite dotar de una perspectiva social a nuestro estudio, bien a través de los restos humanos, bien a través de las inscripciones funerarias. Así, además de preguntarnos sobre la ubicación de la basílica dentro de la topografía de la ciudad (intra o extra muros, próximas o alejadas de los antiguos centros de poder) o sobre la orientación del edificio en sí (tal vez vinculada a cambios religiosos), a nivel microespacial podemos preguntarnos sobre la posición de las tumbas dentro o junto a la basílica y examinar cuestiones de carácter social, como la edad, el género o la posición social de las personas enterradas. Pero, a la vez, podemos observar también su desarrollo a lo largo del tiempo, atendiendo a las diferencias cronológicas de los epígrafes y a la propia evolución arquitectónica de los edificios.

Sin embargo, como veremos, en ocasiones estas preguntas son más fáciles de formular que de responder. Al estudiar estos edificios nos encontramos con varios retos, uno de los más obvios es si la basílica continúa en uso. En este sentido, el hecho de que la de santa Eulalia haya podido ser excavada es bastante inusual. Se trata de una iglesia en funcionamiento a día de hoy, así que obtener los permisos para excavar en su interior, donde además se presumiblemente podían encontrarse las tumbas de santos locales, no es para nada sencillo. Desafortunadamente, aquellas basílicas que ya no están en uso presentan también sus propios inconvenientes. Estos edificios a menudo han sido utilizados como “canteras” en períodos posteriores; es decir, sus materiales fueron reutilizados para construir nuevos edificios y, por tanto, a menudo esto implicaba la destrucción o al menos la alteración del registro estratigráfico.

Planta de la basílica de Melléus, en Haïdra, con relicario de Cipriano y epitafio de Melléus hallados en la misma (Imágenes de Duval 1975).

Aún así, es interesante advertir que el registro epigráfico de la basílica de Melléus en Haïdra está mejor conservado que en la de santa Eulalia de Mérida y precisamente por las mismas razones. Como la iglesia de santa Eulalia continuó en uso y mantuvo la memoria martirial, su relevancia religiosa se mantuvo y también el interés por enterrarse en su interior. De modo que, para colocar estas nuevas sepulturas, las anteriores se vieron afectadas e incluso desplazadas. En consecuencia, sólo un epitafio ha sido encontrado in situ: la triple inscripción de Gregorio, Perpetua y Heleuterio. En cambio, la basílica de Melléus quedó abandonada y pasó en gran medida desapercibida ante la envergadura de otros edificios monumentales de Haïdra, por lo que afortunadamente su registro arqueológico se conservó hasta las primeras excavaciones a inicios del siglo XX.

Triple epitafio encontrado in situ en la basílica de santa Eulalia de Mérida (CILAE 1278).

A pesar de las problemáticas de localización, podemos estudiar la epigrafía en función de multitud de criterios. Por ejemplo, podemos extraer mucha información fijándonos simplemente en el soporte u objeto en el que se realizó la inscripción. Las inscripciones funerarias pueden ser, entre otras, laudas de sarcófagos, pequeñas placas que cubren un nicho o estelas. Esto ya nos da información sobre el método funerario. Del mismo modo, podemos analizar la materialidad: ¿qué tipo de piedra se utilizó, una piedra local o un trozo de mármol procedente de lejos? Una vez determinado el objeto, podemos recurrir al texto, que además de aportar bastantes datos y también puede plantearnos aún más preguntas. Ya hemos tratado la cuestión de las inscripciones tipo locus de la «Basilique de la Citadelle» de Haïdra, las cuales siguen siendo un enigma en cuanto a qué se refieren. Sin embargo, antes de leer el texto también podemos obtener información a través de otros elementos. En el paso de la época imperial a la Antigüedad tardía a menudo encontramos iconografía cristiana junto al texto. Podemos pensar en símbolos claros como la cruz, el estaurograma o el cristograma, pero también se solía utilizar iconografía menos clara como palomas y peces.

Después de analizar todos los otros elementos de la inscripción, es el momento de examinar el texto en sí. Los epígrafes funerarios suelen usar muchas fórmulas, es decir, suelen seguir un patrón común con expresiones estandarizadas. Así, nos encontramos con distintas fórmulas funerarias, como D(is) M(anibus) S(acrum), que significa “consagrado a los dioses Manes” y que realmente se trata de una fórmula inicial estándar. Ésta, sin embargo, se asocia por lo general a inscripciones paganas pero, como al ser una expresión prácticamente indisociable de las inscripciones funerarias durante siglos, su uso se mantuvo también en las inscripciones cristianas durante bastante tiempo. Esto puede observarse en varias de las inscripciones cristianas de la basílica de Hildeguns en Makthar, las cuales siguen comenzando con la expresión DMS. Por ejemplo, la tumba del clérigo Rogatus, enterrado en esta misma basílica, fue cubierta con una losa de piedra caliza con la siguiente inscripción:

D(is) M(anibus) S(acrum)
(cruz griega)
Rogatus cleri-
cus fidelis bixit
in pace annis bi-
ginti q(u)inq(u)e men-
ses q(u)atuor (h)ora-
s septe 

La inscripción es claramente cristiana, como lo demuestran la cruz griega y el hecho de que se trate de un clérigo. En el texto hay más indicios de su naturaleza cristiana. Fidelis, fiel, aparece a menudo en las inscripciones funerarias cristianas, lo que probablemente indica que Rogatus fue bautizado. Lo mismo ocurre con la fórmula in pace. Por otro lado, parece que Rogatus, o sus familiares, también vigilaban de cerca su edad: tenía 25 años, cuatro meses y siete horas. Se ha argumentado que esta indicación tan precisa incide en la brevedad de su vida: valía la pena anotar las horas que vivió, ya que vivió poco tiempo. En este sentido, la edad al morir se registra con más frecuencia en las inscripciones cristianas ya que marca la transición de la vida en la tierra a la vida en el cielo. Por ello a veces también encontramos la fórmula plus minus, que sirve para indicar una estimación de la edad cuando ésta es incierta.

Es evidente que datos como el nombre, el cargo y la edad pueden darnos una idea de las personas enterradas en las iglesias. También podemos plantearnos preguntas sobre la edad, el sexo, la distribución de sexos, la función y la cronología. Esto último es posible cuando disponemos de la era o indictio (un tipo de registro cronológico propio de la Antigüedad tardía) o utilizando formas indirectas de reconstruir la datación, basadas en la paleografía (la forma en que está escrito) o en el contexto arqueológico. Con este tipo de datación podemos observar cambios en las fórmulas a lo largo del tiempo, o bien cambios en las costumbres funerarias durante el período de uso de las iglesias. Sin embargo, hay que tener en cuenta una cuestión importante: la epigrafía está muy sesgada. No todas las personas podían permitirse una inscripción, ni siquiera tenían derecho a ser enterradas dentro de los muros de la basílica. Por ello, debemos ser prudentes a la hora de extraer conclusiones sobre la población de las ciudades estudiadas. No obstante, teniendo en cuenta los límites de la arqueología y la epigrafía, podemos observar nuevas pautas y comprender un poco mejor el uso de las basílicas en la Antigüedad tardía de Hispania y África. En un futuro próximo esperamos publicar un artículo sobre este tema, pero por ahora es un trabajo en curso. ¡Os animamos a seguir nuestras redes sociales si queréis ver nuestras caras de felicidad cuando salga la publicación!


Categorías
Uncategorized

Los estudiantes asistentes de ATLAS

Detrás de cada grupo de investigación hay siempre un grupo de ayudantes diligentes, buena parte de los cuales a menudo son todavía estudiantes. En cuanto a nuestro proyecto, tenemos a tres estudiantes alemanes que trabajan con y para nosotros. El post de hoy está dedicado a su trabajo, así que vamos a darles la palabra para que se presenten y nos cuenten las tareas que cada uno de ellos realiza dentro de nuestro proyecto.

La primera que se unió al proyecto ATLAS fue Jill Lilian Fischer, ya desde el comienzo del proyecto en abril de 2021, durante su tercer trimestre de BA en la Universidad de Hamburgo. Actualmente está cursando el primer semestre del máster en Historia. Una de las primeras tareas que realizó (y que sigue realizando) es traducir los posts de este blog al francés. Modesta como siempre, le gustaría precisar que no es su lengua nativa. Además, también ha trabajado considerablemente en la bibliografía del proyecto, incorporando las referencias en nuestra base de datos Zotero. Desde este año su tarea principal ha sido la digitalización de mapas y datos usando el programa QGIS. Al ser una verdadera fan de los mapas en todas sus formas (históricos y fantásticos), está realmente contenta de aprender a manejar QGIS y de explorar sus posibilidades para crear nuevos mapas.

Categorías
Uncategorized

ATLAS y RomanIslam visitan Africa Romana

Justo antes de finalizar el año 2022, Sabine (nuestra directora y del centro RomanIslam) y Pieter tuvieron la oportunidad de participar en el congreso Africa Romana (del 16 al 18 de diciembre) mediante una colaboración RomanIslam-ATLAS. Este verano, Stefan Ardeleanu (postdoc del RomanIslam Center y miembro de ATLAS) les propuso formar un equipo y escribir un resumen para este congreso centrado, esta vez, en el periodo julio-claudio. Aunque la temática está algo lejos de nuestra querida Antigüedad tardía, estábamos seguros que nuestro trabajo anterior sobre este periodo sería de utilidad. Así que escribimos un resumen sobre el estudio de la difusión del culto imperial en África en época julio-claudia:

L’émergence du culte impérial en Afrique du Nord : matérialité, acteurs, contextes spatiaux

Desde el principio estuvo claro que Sabine y Pieter presentarían en Sbeitla y que sería en francés, por lo que entonces tuvimos que empezar a preparar la comunicación para diciembre. Stefan, como especialista en el norte de África, se encargó de redactar el artículo, y Sabine y Pieter añadieron sus puntos de vista a lo largo del proceso. Al final, teníamos un artículo que contenía las pruebas arqueológicas, epigráficas y numismáticas, reunidas en unos pocos mapas. El 15 de diciembre comenzó nuestro viaje a Sbeitla. Hay que reconocer que lo complicamos un poco más de lo necesario… Para nuestra comodidad, tomamos un vuelo que llegaba a última hora de la tarde a Túnez. Sin embargo, uno no llega a Sbeitla tan fácilmente, ni con transporte público. Por suerte, nuestros colegas del INP nos organizaron un viaje hasta allí y, tras un largo trayecto, llegamos al hotel poco antes de medianoche.

Las vistas desde la habitación; la inauguración de la conferencia; y el intermezzo a cargo de Mehrez Abidi.

Después de una buena noche y un delicioso desayuno, estábamos frescos y con ganas de participar en el congreso. Como veréis en las fotos, el congreso tuvo lugar en el mismo hotel, por lo que fue fácil desplazarse. La inauguración propiamente dicha ocupó toda la primera parte de la mañana, por lo que, tras la pausa para el café (¡más deliciosos dulces tunecinos!), pensamos que ya empezaría la primera presentación. ¡Pues no en Africa Romana! Para nuestra sorpresa nos deleitaron con la música del oudista Mehrez Abidi, que había escrito algunas piezas nuevas combinando estilos de música folclórica sarda y tunecina. Tras este intermezzo musical – o quizá pieza de cierre de la inauguración–, comenzaron las primeras presentaciones. Tras las primeras presentaciones ya nos hicimos una buena idea de que la conferencia encerraba un montón de nuevas investigaciones (¡epigráficas!) e ideas. A pesar de que el enfoque en el periodo julio-claudio estaba cronológicamente alejado del nuestro, varias de las presentaciones nos ofrecieron nuevas perspectivas sobre el desarrollo temprano de las provincias y su relación con el urbanismo en la Antigüedad tardía.

El largo tiempo reservado para el almuerzo dio la oportunidad a Sabine y Pieter de sentarse juntos y ensayar la presentación. Como no queríamos molestar a los demás participantes nos fuimos a nuestras habitaciones contiguas y nos dimos cuenta de que podíamos trabajar desde nuetros propios balcones con vistas a Sufetula, la Sbeitla romana.

El Hotel Byzacene nos proporcionó el mejor entorno para terminar la presentación 😉

Terminamos a tiempo para la presentación de Rubén, miembro también de ATLAS, y volvimos a la sala de conferencias. A lo largo del día tuvimos tiempo de sobra para reencontrarnos con viejos amigos y hacer algunos nuevos. La cena permitió añadir un toque culinario a más debates y charlas. El hecho de que se reúnan investigadores de Túnez, Argelia, Italia, Francia, España o Alemania (seguro que nos olvidamos algunos países) convierte este congreso en un lugar interesante para intercambiar ideas que tienden puentes entre las distintas propuestas, a menudo delimitadas por fronteras nacionales o lingüísticas. Aunque la frontera más clara es la lingüística: en cada reunión, lo primero que hay que averiguar es qué lengua es común entre los miembros. Como es lógico, la mayoría de las veces se utiliza el francés, de ahí que nuestra presentación fuera en esta lengua. Sin embargo, hemos hablado más castellano de lo que hubiéramos imaginado antes de ir a Sbeitla.

A la mañana siguiente estábamos todos emocionados y listos para salir. Desayunamos temprano y nos dirigimos a imprimir nuestros textos en francés. Fuimos a la pequeña sala de administración, donde se encontraban los estudiantes sardos encargados del buen funcionamiento del congreso. Como si estuviéramos en un sketch, tuvimos que pedir lo que queríamos al estudiante número uno, sentado frente a la mesa con la impresora. A continuación, el estudiante nos envió a otra mesa situada unos pasos más allá, algo más alejada de la impresora. Tras exponer nuestro propósito, nos guiaron hasta la impresora. Con los textos aún calientes tras la impresión, nos dirigimos a la sala piccola (lo entendemos, los primerizos en Africa Romana no van a la sala grande 😉 ). Nos tocó presentar justo después de la pausa para el café. Por suerte, varias personas trataron también el tema del culto imperial en sus intervenciones, lo que dio lugar a un buen debate sobre este tema al final de la sesión. Está claro que nuestra presentación y nuestras ideas han calado hondo. ¡Ya tenemos ganas de publicar nuestra ponencia en las actas!

¡Todo listo para nuestra presentación!

La visita a Sufetula no estaba prevista, a pesar de tenerla tan cerca, así que nos lanzamos por nuestra cuenta. Con un grupo reducido, salimos temprano de la pausa del almuerzo para visitar el yacimiento. Sabine y Pieter, acostumbrados a la realidad arqueológica hispana, quedaron asombrados por el grado de conservación de la ciudad: muchos edificios conservan gran parte de los muros en pie o bien han sido reconstruidos para mostrar cómo sería originariamente. El foro de la ciudad, con el capitolium y la fortificación tardoantigua, es simplemente impresionante. Paseando por el recinto, empezamos a buscar las diferentes basílicas e iglesias que sabíamos que estaban allí, pero una cosa es conocer la existencia de estos edificios y otra muy distinta es ver con nuestros propios ojos la asombrosa calidad de sus baptisterios. Como era de esperar, perdimos la noción del tiempo y tuvimos que volver corriendo a la conferencia. Un amable trabajador nos permitió saltar una valla para que pudiéramos acortar al menos media hora de camino.

El arco de los cuatro emperadores de Sufetula; los miembros de ATLAS en el capitolio; y uno de los muchos baptisterios.

El último día de la conferencia fue el que esperábamos con impaciencia: la visita a Ammaedara. Como sabéis, se trata de una de nuestras ciudades de estudio pero su visita no siempre es posible, ya que la región cercana a la frontera argelina es conocida por su inseguridad. A pesar de ello, la organización del congreso nos ofreció una visita guiada a cargo de nada menos que François Baratte y Mohamed ben Nejma, ambos conocidos expertos del yacimiento. La aventura empezó por la mañana temprano, cuando subimos al autobús y nos dirigimos a Haïdra. En un momento dado nos dimos cuenta de que había una pequeña patrulla de policía delante de nuestra caravana de coches y del autobús turístico. Todos sanos y salvos llegamos a Ammaedara. Los guardias, además, estaban relajados; nada de lo que preocuparse entonces.

La visita comenzó en el pequeño museo que alberga algunas de las hermosas piezas de Ammaedara, donde François Baratte nos explicó la historia de la ciudad y sus excavaciones arqueológicas. Tras esta introducción histórica empezamos la visita del yacimiento pero, por desgracia, sólo disponíamos de una hora y media para visitar este asombroso yacimiento. Empezamos por la Basílica I, donde pudimos ver las losas funerarias in situ; y no había precisamente pocas, sino montones. Ya os podéis imaginar a los epigrafistas corriendo de un lado a otro con sus cámaras, jugando con las luces y sombras para conseguir las mejores fotos. Desde allí nos dirigimos hacia uno de los muchos puntos de interés de la ciudad: la fortaleza bizantina. Las torres redondas que se pueden ver todavía en pie no son bizantinas sino añadidos modernos de otra época de guerra. Aun así, el resto de las torres conservadas y tramos de muralla sí fechan de la Antigüedad tardía y son igualmente impresionantes. Dentro de la ciudadela encontramos dos basílicas, de las cuales visitamos la Basílica III. Se trata de un edificio de dos plantas adyacente a la muralla exterior de la ciudadela. Como el tiempo era limitado, hicimos un recorrido de los puntos más destacados, así que a continuación nos fuimos a visitar el llamado Monument des auges. Este tipo de edificio se encuentra en varias ciudades africanas, pero incluso a día de hoy (a pesar de un reciente libro sobre el tema) no se comprende del todo. Terminamos con el edificio más famoso de todos: el arco de Septimio Severo. Se trata de un arco del siglo III muy bien conservado que, durante la Antigüedad tardía, quedó parcialmente envuelto por varios muros para crear una torre.

El coche de la policía guiando el autobús; François Baratte debatiendo con Sabine; la Basílica III.

Maravillados todavía por la belleza de Ammaedara regresamos al hotel, pero no sin antes dar un pequeño rodeo visitando algunas tiendas de artesanía tradicional. Tras esta parada, ahora sí, regresamos al hotel para nuestra última comida. Como teníamos previsto volar de vuelta el lunes por la mañana temprano, tuvimos que partir hacia Túnez el domingo por la tarde.

Dentro de unos meses, esperamos que nuestro artículo se publique ¡en acceso abierto!


Categorías
Uncategorized

Vuelve la temporada de congresos

¡Ya estamos en esta época del año otra vez! Tras el parón veraniego, la temporada de congresos vuelve a empezar, y lo hace con ganas. De hecho, cuando el “verano académico” terminó a finales de agosto y volvimos a abrir nuestras agendas nos dimos cuenta de que nos esperaba un otoño con una programación realmente completa.

Los primeros encuentros en septiembre
El primer congreso de este nuevo año académico fue el Congressus Internationalis Epigraphiae Graecae et Latinae, conocido también en su versión corta como CIEGL. Esta conferencia tiene lugar una vez cada cinco años y reúne a epigrafistas de todo el mundo para debatir sobre las últimas aportaciones e investigaciones venideras en el campo de la epigrafía. En esta ocasión, la reunión los llevó a la bonita y calurosa Bordeaux, del 29 de agosto al 2 de septiembre. Desde ATLAS fueron varios los miembros que participaron y presentaron su trabajo: nuestra directora, Sabine Panzram, organizó un panel titulado “L’épigraphie du « Cercle du détroit de Gibraltar »” en el que además, participó la directora científica de la Casa de Velázquez para las épocas antigua y medieval, Gwladys Bernard. En la sesión “Les traditions épigraphiques après Dioclétien” Morgane Uberti, miembro de ATLAS, presentó su trabajo sobre el proyecto Inscriptions de Gaule entre Antiquité et Moyen Age. En cuanto a nuestro postdoc, Pieter Houten, no presentó una comunicación como tal pero sí dio a conocer el nuevo WebGIS con el equipo de LatinNow al que pertenece: www.gis.latinnow.eu.

Miembros del proyecto ATLAS en CIEGL

A este primer congreso le ha seguido el IV Coloquio de Arqueología e Historia Antigua de Los Bañales, que llevaba por título “Pecunia communis: recursos económicos y sostenibilidad de las pequeñas ciudades hispanorromanas” y que tuvo lugar del 22 al 24 de septiembre en Ejea de los Caballeros y Uncastillo (Zaragoza). También en este caso participaron varios miembros de ATLAS, como tuiteamos hace unos días. Darío Bernal Casasola dedicó su ponencia a las ciudades del garum en Hispania, centrándose especialmente en uno de nuestros casos de estudio, Baelo Claudia. Alfred Hirt, por su parte, presentó un detallado análisis sobre la producción metalúrgica en la Península Ibérica durante el periodo romano, haciendo hincapié en la importancia de los recursos minerales. Por último, nuestra postdoc, Ada Lasheras González, dio a conocer el interesante proyecto Circ-E, en el que también participa y que está dedicado al estudio de la logística y de los principios de la economía circular en las ciudades hispanorromanas. Nuestra directora, Sabine Panzram, se sumó el último día del coloquio durante la visita al yacimiento de Los Bañales.

Los participantes del coloquio en Los Bañales

Más congresos por venir
El próximo mes de octubre tendrá lugar el anual workshop TOLETUM (podéis encontrar más información clicando en este enlace). A pesar de que ningún miembro del equipo ATLAS va a presentar nada, TOLETUM nos resulta muy próximo no sólo porque Sabine Panzram es su fundadora y co-organizadora, sino también porque todos nosotros hemos participado en al menos uno de sus workshops en los últimos años. Este año TOLETUM celebra su decimotercera edición, dedicada a los valles fluviales de Hispania en perspectiva diacrónica, con el objetivo de tratar los diferentes aspectos de los valles fluviales en la Antigüedad desde el siglo III a.C. hasta el siglo IX d.C.

La famosa Warburghaus en Hamburgo

En noviembre la Warburghaus va a acoger otro congreso, titulado Shifting Cities in the Iberian Peninsula, III BC – IX AD, co-organizado también por Sabine Panzram (¡es increíble el número de congresos que está organizando!). En esta reunión científica algunos miembros de ATLAS van a presentar igualmente su trabajo. Empezará el jueves, con la co-presentación de nuestros colegas de Hamburg, Sabine Panzram y Pieter Houten, dedicada a la posible transformación de las civitates en la Antigüedad tardía. El viernes nuestra colega de la Casa de Velázquez, Ada Lasheras González, presentará junto a Joan Negre y Francesc Rodríguez Martorell, los cambios observados en las ciudades de Ṭarrakūna y Ṭurṭūša en los primeros siglos de al-Andalus. Le seguirá nuestra colega María Teresa Casal-García con uno de nuestros estudios de caso, Madīnat Qurṭūba. El sábado continuaremos con la presentación de Sonia Gutiérrez Lloret sobre el urbanismo en el sureste de la Península Ibérica. ¡Este congreso promete!

La temporada de congresos acaba en diciembre con la reunión Africa Romana XXII. Si bien el período julio-claudio queda un tanto alejado del foco de ATLAS, varios de nuestros miembros van a participar con distintas comunicaciones. Primero Rubén Olmo-López presentará su trabajo sobre los magistrados. Y, el sábado, Sabine Panzram, Stefan Ardeleanu y Pieter Houten, van a dedicar su comunicación conjunta al culto imperial en el norte de África.

El capitolium de Sbeitla (Wikipedia)

Y entre todas estas conferencias, nuestros grupos de investigación han estado reuniéndose para la que probablemente sea la reunión más importante de ATLAS:

El encuentro ATLAS en La Rochelle
Del 9 al 10 de noviembre tendrá lugar el tercer encuentro ATLAS en la Université La Rochelle. Esperamos tener el programa definitivo en los próximos días y publicarlo en nuestra página web, como de costumbre. Sin embargo, os podemos adelantar cuál es la idea detrás de este nuevo workshop. Como en el encuentro anterior, estas reuniones nos sirven para poner en común el trabajo realizado por los grupos de investigación y, en este caso, dispondrán de una hora para hacerlo. Los grupos pueden optar por dos presentaciones de 20 minutos seguidas de 10 minutos de debate, o bien realizar una presentación más larga con un debate también más largo. Algunos grupos han tomado ya la decisión y parece que vamos a tener un programa variado en este sentido. Pero además de las presentaciones de los grupos, en esta ocasión hemos invitado a Marc Heijmans del CNRS, director de otro proyecto Atlas: Atlas topographiques des villes de Gaule méridionale. Presentará su trabajo sobre las ciudades de Galia meridional en la Antgüedad tardía. También tendremos la oportunidad de recibir a Didier Bayard, del INRAP, que presentará una síntesis sobre las ciudades del norte de la Galia en la Antigüedad tardía.

Estamos deseando poder participar en todos estos congresos y tener la oportunidad de dar a conocer nuestro trabajo e intercambiar ideas con los y las colegas. Pero sobre todo tenemos ganas de asistir al próximo encuentro ATLAS, donde tendremos la oportunidad de encontrarnos con los miembros de nuestro proyecto y debatir específicamente sobre el urbanismo en la Antigüedad tardía.

Université La Rochelle (Wikipedia)

Categorías
Uncategorized

Combinando Epigrafía y Arqueología

En el proyecto ATLAS, como seguramente ya sabéis, combinamos distintos tipos de fuentes y evidencias. Las más visibles en nuestro WebSIG son la arqueología y la epigrafía y, de hecho, además de la diferenciación en los iconos y en las fichas, también están dividas entre nuestros dos post-docs: Ada se encarga de los datos arqueológicos y Pieter de los epigráficos. Pero a pesar de la clara distinción entre estos datos, en realidad los combinamos para comprender mejor las evidencias analizadas. Así que en el post de hoy os traemos unos cuantos ejemplos de nuestros casos de estudio para mostrar cómo epigrafía y arqueología van de la mano.

Baelo Claudia

Que la epigrafía y la arqueología no deben ser dos partes diferenciadas en el proyecto quedó bien claro desde el inicio. Resulta significativo e igualmente interesante que la colaboración entre Pieter y Ada empezara cuando se conocieron en La Rochelle, donde trabajamos por primera vez en el WebSIG y en nuestro primer caso de estudio, Baelo Claudia. Al añadir una de las siete (!) inscripciones de la Baelo tardoantigua, Pieter descubrió que una de ellas (IRCB 135) estaba realizada sobre un plato de terra sigillata fechado en el siglo V en base a la tipología cerámica Hayes 87B. Medio en broma, Ada dijo “¡Déjame comprobarlo!” y cogió la publicación de Hayes, Late Roman Pottery. De este modo pudo constatar que el tipo Hayes 87 se fecha efectivamente en el siglo V, pero que la variante 87B se data a inicios del siglo VI. Así, para nuestra sorpresa, nuestra primera colaboración se demostró fructífera. Está claro que no vamos a cambiar la historia de Baelo Claudia con esta puntualización cronológica, pero sin duda fue un buen comienzo y un recordatorio de que epigrafistas y ceramólogos deben colaborar para afinar las cronologías.

Emerita Augusta

En nuestro anterior post sobre Mérida ya dedicamos unas líneas a la basílica de santa Eulalia y sus orígenes como basílica funeraria. Situada en el área suburbial norte de la ciudad, esta basílica de mediados del siglo V se construyó sobre una zona de necrópolis que se remonta al siglo IV. Además, el carácter martirial de esta basílica viene corroborado por el mantenimiento de un mausoleo, que quedó englobado dentro del ábside central de la iglesia y al cual se podía acceder gracias a la cripta, construida de manera coetánea al edificio. Este monumento funerario jugó un papel destacado en el desarrollo de la necrópolis, como puede observarse a través del gran número de tumbas y epitafios dispuestos a su alrededor, ratificando que muy probablemente este fue el mausoleo que acogió las reliquias de la mártir emeritense.

Interior de la basílica de santa Eulalia durante las excavaciones arqueológicas (fotografía P. Mateos Cruz – IAM)

Pero, a pesar de que el mausoleo mencionado no conservaba ningún elemento epigráfico, la importancia de Eulalia para la ciudad de Mérida se constata igualmente en otras inscripciones, una de las cuales se refiere a su casa (CILAE 1407 / AEHTAM 612):

Inscripción religiosa referente a la domus de santa Eulalia (CILAE 1407. Fotografía: Pieter Houten).

(crux) Hanc domum iu/ris tui, placata, posside, /martir Eulalia, · / ut cognoscens inimicus, / confusus abscedat, ·ut domus h(a)ec cum habi/tatoribus, te propitiante, florescant /Amen

La traducción que nos ofrece el CILAE (1407) es la siguiente:

“Mártir Eulalia, quédate, ya aplacada, con esta casa (que es propiedad) tuya por derecho, para que el enemigo (de la fe católica) se aperciba de ello y salga huyendo, cubierto de vergüenza, así que puedan florecer esta casa y sus vecinos bajo tu protección. Amén”.

Esta placa de mármol fue reutilizada y encontrada en una excavación a unos 700 m de la basílica, en la calle Forner. De entrada, la mención a la casa de Eulalia podría vincularse a una iglesia pero, sin embargo, si leemos el texto con más detenimiento vemos que la inscripción también alude a aquellos que viven en la casa. Esto ha causado cierto debate científico entorno a si el epígrafe se refiere a la basílica o a otro edificio, como el xenodochium o, tal vez, a un monasterio.

La segunda inscripción (CILAE 1411) se refiere también a un edificio religioso y presenta problemas similares ya que también se encontró reutilizada, en este caso en el arco de entrada a la Alcazaba.

Inscripción dedicada al aula de las reliquias de los mártires, incluyendo las de santa Eulalia (CILAE 1411. Fotografía: CILAE).

(crux) dedicata est hac aula ad nome+[- – -] / riosissime matri Domini nostri H+[- – -] / dum carnem omniumque virginum princ[- – -] / ne cunctorum populorum catolice fide+[- – -] / iussa creare sunt reliquiae reco ndit+[- – -] / de cruce D(omi)ni n(ostr)i • s(an)c(t)i Iohanni Baptiste s(an)c(t)i S+[- – -] / s(an)c(t)i • Pauli • s(an)c(t)i • Iohanni Evangeliste s(an)c(t)i • Iacobi • s(an)c(t)i • Iuli[- – -] / s(an)c(t)e • Eulaliae • s(an)c(t)i • Tirsi s(an)c(t)i • Genesi • s(an)c(t)e Marcille • sub d(ie) VIII Kal(endas) Febru[- – -]

La traducción propuesta en el CILAE (1411) es la siguiente:

“Fue dedicada esta iglesia a nombre de la gloriosísima Madre de Nuestro Señor Jesucristo, según la carne y Princesa de todas las vírgenes y Reina de todos los pueblos de la fe católica, bajo cuya ara sagrada se guardan reliquias de [—] sobre la cruz de Nuestro Señor, de San Juan Bautista, de San Esteban, San Pablo, San Juan Evangelista, San Jacobo, San Julián, Santa Eulalia, San Tirso, San Ginés, Santa Marcilla, en el día 8 anterior a las kalendas de febrero (25 de enero)”.

Como en el caso anterior, la iglesia, mencionada como aula en la inscripción, no ha sido localizada. Se ha propuesto que la iglesia se situara en la Alcazaba, posiblemente en el aljibe. Otras hipótesis han considerado que el epígrafe hiciera referencia a la reconsagración de una iglesia preexistente en Mérida. En este sentido, tal y como nos informan las Vidas de los padres emeritenses, la catedral se conocía anteriormente como la iglesia de Jerusalem y, más adelante, pasó a consagrarse a santa María (VSPE IV ix 2). Así que bien podría ser que esta inscripción conmemorara la reconsagración de la catedral.

Resulta interesante que la epigrafía de Mérida relacionada con la mártir emeritense no haya aportado ninguna dedicatoria a la basílica de santa Eulalia en sí, aunque nos informa de dos edificios más donde fue venerada. En el territorio, concretamente en San Pedro de Mérida, encontramos una tercera inscripción referente a Eulalia. Aquí se halló una baldosa con un monograma compuesto por las letras L, S, N, A, E, C y T, cuya lectura podría ser Sancte Eulaliae.

Mactaris

La llamada “Schola des Juvenes” es otro ejemplo a destacar en esta combinación de la arqueología y la epigrafía. El nombre del edificio procede de una interesante inscripción reutilizada en las escaleras de unas termas cercanas, conocidas como “Thermes du mégalithe”, construidas probablemente en el siglo III:

Inscripción de la “Scholes des Juvenes” (AE 2016, 14. Fotografía: EDH)

Sin embargo, esta inscripción se fecha en el 88 d.C. y se refiere al edificio del periodo imperial, por lo que no vamos a centrarnos en ella para mostrar este trabajo conjunto sino en la conversión de la supuesta schola en una basílica cristiana, tal y como twitteamos recientemente. La basílica cristiana se construyó reutilizando el ámbito oeste y el peristilo del edificio anterior. A nivel arquitectónico, se trata de una basílica de tres naves, dividida por una doble columnata colocada directamente sobre el pavimento musivo anterior, y realizada con materiales reciclados. Los dos últimos tramos de la nave central estaban ocupados por el coro, delimitado por canceles, y en el centro se localizó un altar, para cuya base se reutilizó una inscripción funeraria. A los pies de la basílica se ha identificado otro ámbito que ocupaba el ala oeste del peristilo del edificio anterior. El intercolumnio de este lado del antiguo patio fue tapiado con material reciclado, dejando un único acceso en el lado noroeste. Este espacio se ha interpretado como nártex o contra-ábside, ya que en su interior se halló un monumento funerario reutilizado como base de altar, inserto dentro de un ciborio de planta rectangular.

Pero además de este cambio en la función de la arquitectura preexistente, el pavimento de la sala absidal con decoración geométrica en blanco y negro, posiblemente del siglo III, también fue reutilizado. Durante el periodo de uso de la basílica, el mosaico se cortó para colocar tres nuevos mosaicos epigráficos que, gracias a las referencias a la indictione en las inscripciones, pueden fecharse en el período bizantino, presumiblemente en el siglo VI. La indictio es la indicación al ciclo fiscal de quince años especialmente atestiguado en los siglos V y VI. Desafortunadamente la fecha de la indictio sólo menciona el año dentro del ciclo, por lo que no podemos determinar el año exacto de estas inscripciones, pero sí podemos situarlas dentro del periodo bizantino ya que ésta es una práctica que los vándalos no llegaron a aplicar. En este sentido, las similitudes entre los tres epígrafes parecen sugerir que serían contemporáneos, si bien existe igualmente la posibilidad de que algunas inscripciones fueran añadidas posteriormente a imitación de la original. De hecho, el mosaico situado a la derecha pudo ser incorporado posteriormente, imitando a los otros dos pero a un tamaño menor.

Mosaico con triple inscripción, conservada en el Musée de Mactaris (ICMactar II, 1 a 3. Fotografía Ada Lasheras González).

Estos tres textos nos ayudan a comprender la reutilización de este edificio como basílica cristiana:

+ Animo mente corp/oreque Constantin/us oriundus Paulini m/atreque (H)onorata / rabiem inimicorum / tropeo fidei vincens / cum Chr(ist)o fidelis per s(a)e/cula regnaturus / bis tricenos quat(t)uor / annos menses VIII / vixit / hic ultimus claudit dies / despositus sub d(ie) XIII Kal(endas) / Mai(a)s ind(ictione) quarta decima

ICMactar II, 1

+ Terra premes te/neros iniusto ponde/re Manes qua<n=M>ta te/cum bona de summi/s duces ad ima hic / Honorata tibi mem/bra ponit animamque / Tonanti <h=TI>os tibi ap/ices filia <v=B>aledictu/ra discedam bis qua/ternos functa anno/s debitum vit(a)e finem r/eddidit sub die depo/sita octa<v=B>u(m) Id(us) / April<e=I>s ind(ictione) XIIII

ICMactar II, 2

+ In (h)oc [tumulo] / deposita [est] / Co(n)st[antia(?) vix]/it in pace [an(n)u(m)] / unu(m) men[ses – – -] / die(s) III N(o)n(as) [- – -] / in[d(ictione)

ICMactar II, 3

Desde luego, las indicaciones más claras de la adscripción cristiana son las cruces presentes al inicio de las tres inscripciones, pero también nos encontramos con otros elementos en los textos que nos confirman el carácter cristiano. En este sentido, también corroboran la presencia de inhumaciones en el interior de la basílica, siendo un buen ejemplo de ello la expresión In (h)oc [tumulo] / deposita [est] (“en esta tumba se encuentra”) que puede leerse en el menor de los tres mosaicos. Los otros dos textos son menos evidentes, pero también aluden a la existencia de enterramientos en este lugar:

ICMac II-1: Hic ultimus claudit dies (“Aquí se enterró en su último día”)

ICMac II-2: Hic Honorata tibi membra ponit animamque Tonanti (“Aquí yacen el cuerpo y el alma de Honorata, para ti, dios tronante”)

En este último caso, la referencia al “dios del trueno” es algo desconcertante y podría hacernos dudar, ya que ciertamente podría pensarse en Júpiter o en otros dioses con atributos similares.

Por otro lado, la presencia de inhumaciones en un lugar tan central dentro de la basílica plantea otra pregunta: ¿podría tratarse de las sepulturas de unos mártires? Las inscripciones, desafortunadamente, no nos aportan una confirmación clara en este sentido, si bien la de mayor tamaño podría interpretarse de modo que apoyara tal posibilidad: …rabiem inimicorum tropeo fidei vincens… (“… victorioso sobre la furia de los enemigos con el trofeo de la fe…”). Podría entenderse, por tanto, que Constantinus murió debido a la furia de sus enemigos, condenado por su fe, y que como resultado de su fe ahora se encuentra victorioso en el cielo. Sin embargo, bien podría hacer referencia también a la victoria frente a las tentaciones que le presentó el demonio.

Pero, sea como fuere, de nuevo el trabajo conjunto y la combinación de los datos epigráficos y arqueológicos nos permiten obtener una imagen mucho más completa de esta basílica cristiana y de su desarrollo sobre un edificio anterior. De hecho, como hemos mostrado en todos los ejemplos expuestos, a pesar de la distancia entre los postdocs de ATLAS – que trabajan en Hamburg y Madrid respectivamente – y sus distintas especializaciones, están siendo capaces de combinar oportunamente estos dos campos de estudio. Esta combinación de disciplinas es precisamente la esencia y una de las innovaciones de ATLAS, que reúne arqueología y epigrafía en un único WebSIG con el objetivo de contribuir al conocimiento de la Antigüedad tardía.


Categorías
Uncategorized

Mapear en el proyecto ATLAS

El nombre de nuestro proyecto ha llevado a algunas personas a preguntarnos si se refiere a la cordillera del Atlas. Lo cierto es que esta interpretación le va estupendamente a nuestro proyecto ya que nuestras regiones de estudio se encuentran a ambos lados de esta cordillera. Pero aunque sea un buen criterio, éste no es el principal significado del nombre de nuestro proyecto. El nombre se refiere al “atlas” de las ciudades tardoantiguas que hemos creado y que usamos para analizar el urbanismo entre los siglos III y VIII. El entrecomillado tiene una razón de ser: no se trata de un atlas al estilo de Der neue Pauly Historischer Atlas der antiken Welt o el Barrington Atlas. Nuestro proyecto no va a crear un atlas impreso sino una herramienta de análisis geográfico en formato web (un WebSIG) centrada en las diez ciudades que conforman nuestros casos de estudio. Y si el tiempo y la financiación lo permite, tal vez ampliemos nuestro objetivo… 

Imagen de nuestro trabajo con el Barrington Atlas (abierto) y el Historischer Atlas der antiken Welt.

Dónde encontrar nuestro WebSIG online

El WebSIG nos permite publicar nuestros resultados, como un atlas impreso, pero también consultar y analizar los datos recogidos. Como tal vez habréis leído en posts anteriores (sobre Baelo o sobre Emerita), el WebSIG está alojado en el servidor Huma-Num y ha sido creado y está mantenido por dos especialistas de la Université de La Rochelle. Hace unos meses estuvimos trabajando con Frédéric Pouget y Alain Layec para encontrar una manera de vincular el WebSIG con nuestra librería de Zotero. Ahora podemos añadir fácilmente las referencias bibliográficas con nuestros datos de Zotero. El siguiente paso, que justo terminamos la semana pasada, es la importación de los datos epigráficos directamente desde un archivo csv a la base de datos del WebSIG. Como twitteamos, antes introducíamos manualmente (y aún lo hacemos con los datos arqueológicos) cada inscripción en la base de datos. Pero como esta información se puede obtener en formato csv desde la base de datos Trismegistos (mediante una licencia de la Universität Hamburg) y mejorarse a través de otras bases de datos y corpora epigráficos, es mucho más sencillo trabajar en un csv (si bien esta predilección por las hojas de cálculo tipo Excel todavía genera controversia en algunos miembros del equipo).

Pantalla de inicio del WebSIG de ATLAS.

Para aquellos de vosotros interesados en echar un vistazo a nuestro trabajo en curso, hemos habilitado una versión de consulta del WebSIG a la que podéis acceder a través de este enlace (seguid leyendo para conocer las funcionalidades de esta herramienta web). Como veréis, Baelo Claudia, Emerita Augusta y Cartago están ya terminadas. Pero si encontráis algún error u omisión, ¡no dudéis en contactar con nosotros!

Breve guía de usuario para el WebSIG

Al visitar nuestro WebSIG se presenta, en primer lugar, la pantalla de inicio con nuestras regiones y casos de estudio. Se puede ampliar a cada uno de los casos de estudio y, a una escala menor de 1: 1,000,000 (está en la esquina inferior izquierda), aparecen los ítems individuales correspondientes a cada una de las evidencias epigráficas y arqueológicas. Veamos un ejemplo con el territorio de Emerita:

Imagen del territorio de Emerita Augusta con la información arqueológica y epigráfica.

En la columna de la derecha, clicando sobre el icono Map (el de la mano que sostiene un globo), se pueden seleccionar u ocultar aquellos ítems que nos interesen. Por ejemplo, si queremos mostrar solamente las iglesias del territorio de Mérida, es tan sencillo como ocultar la epigrafía clicando sobre el icono del ojo que está junto a Inscriptions y, dentro del apartado Edifices, seleccionar únicamente el icono Église. De este modo debería aparecer la siguiente imagen:

Imagen del territorio de Emerita Augusta con los vestigios arqueológicos correspondientes a iglesias.

La cartografía ATLAS

Además de trabajar en nuestro WebSIG también estamos creando otros mapas para algunos proyectos paralelos e intereses científicos de los miembros de nuestro equipo. Como los directores llevan más de un proyecto y los post-doc cuentan con varias habilidades, hemos podido realizar mapas de las regiones de estudio que van más allá de los temas de análisis de nuestro proyecto. De hecho, hemos creado ya varios mapas para presentaciones y publicaciones. Sin embargo, como el desarrollo de estos mapas requiere bastante trabajo y debemos continuar con nuestra investigación principal, hemos decidido formar a algunos estudiantes de Hamburg en QGIS. Gracias a la parte alemana del proyecto, contamos con algunos estudiantes que colaboran en el mismo ayudándonos en distintas tareas. Por ejemplo, la versión francesa de nuestros posts ha sido traducida por Lilian Fischer. Asimismo, a lo largo de los últimos meses, Lilian Fischer, Tjaard Jantzen y Sebastian Meyer nos han echado una mano con la búsqueda de bibliografía, la curación de los datos y su introducción en la base de datos.

Una vez familiarizados con la recopilación de datos para la creación de mapas, hemos pasado al siguiente nivel: aprender a realizar mapas con QGIS. A lo largo de las últimas semanas estos estudiantes han recibido la formación básica gracias al curso QGIS in Classics. Se trata de un curso autodidacta que fue creado en 2020 como una escuela internacional de otoño de TOLETUM. Los estudiantes, acompañados de Lina Schimmelpfennig (ayudante del RomanIslam Center), han realizado los distintos módulos del curso y se han reunido semanalmente con Pieter (uno de los desarrolladores del curso) para comentar los posibles problemas y el progreso. Podéis ver los resultados de este curso en la nueva sección de nuestra página web.

Los estudiantes en una reunión virtual sobre el curso de QGIS.

Maps-to-go

En ATLAS hemos apostado desde el inicio por una política de acceso abierto con respecto a nuestros resultados. Es por ello que también hemos decidido ofrecer en libre disposición los mapas que hemos ido creando a lo largo de este tiempo. Los tenéis en la nueva sección de nuestra página web: Maps-to-go.

En esta sección se podrán encontrar los mapas que el equipo ATLAS ha ido creando y que se basan en la investigación realizada por los miembros o expertos vinculados a nuestro proyecto. Tal vez os resulte familiar la capa base porque estamos usando una capa WMTS, siguiendo el estilo del Digital Atlas of the Roman Empire. Estos mapas disponen de licencia Creative Commons BY-NC, lo cual significa que pueden usarse (y modificarse) libremente siempre que se incluya la referencia al proyecto ATLAS. Así que también podéis hacerlos servir como base para vuestros propios trabajos (mientras no os olvidéis de citarnos). A lo largo de los próximos dos años el proyecto continuará añadiendo nuevos mapas basados en el desarrollo de nuestra investigación. ¡Estad atentos a nuestra cuenta de twitter para conocer las novedades cartográficas!


Categorías
Uncategorized

Coloquio ATLAS en Hamburg

Del lunes 24 al miércoles 26 de enero hemos celebrado el segundo encuentro de ATLAS, titulado Ciudad y Antigüedad tardía: avances y perspectivas. Nos reunimos en la sala de lectura de la siempre impresionante Kulturwissenschaftliche Bibliothek Warburg, o sencillamente la Warburghaus. Gracias a su planta ovalada, la sala crea la ambientación perfecta para el intercambio y debate entre los ponentes y asistentes, pero también entre las distintas personas del público. Además, como no todos los miembros pudieron finalmente venir a Hamburg, la reunión fue en formato híbrido. Así, personas de todas partes pudieron seguir virtualmente la reunión y unirse al debate – ¡desde lugares tan lejanos como Brasil!

Fotografía de la Warburghaus con los carteles del coloquio ATLAS.

El título del coloquio es ya explicativo de su objetivo: debatir los avances y perspectivas de los siete grupos de investigación del proyecto. Dividimos el coloquio en varias sesiones correspondientes con los distintos grupos, y en cada una de ellas se invitó a un ponente externo al proyecto para que hiciera una presentación sobre la temática del grupo. A esta ponencia le seguía una presentación del trabajo en curso del grupo de investigación. Tras ambas presentaciones teníamos previstos 30 minutos para la discusión. Aunque, como suele pasar, los debates pudieron haber durado mucho más, como lo hicieron algunas de las presentaciones 😉 Pero por suerte siempre teníamos una pausa para el café o la comida después de las sesiones, así que pudimos continuar el debate durante estas pausas.

Lunes, 24 de enero
Los dos directores abrieron el coloquio de la manera ya habitual en ATLAS, mostrando así cómo iban a ser los debates: Sabine empezó en castellano, mientras que Laurent lo hizo en francés. Dentro del proyecto la gran mayoría de los miembros hablan al menos uno de estos idiomas y entienden el otro. De este modo podemos mantener debates simultáneamente en francés y castellano.

Sabine y Laurent durante la inauguración del coloquio.

Como invitado en la inauguración del coloquio tuvimos a Hervé Inglebert, de la Université Paris Nanterre, quien nos ofreció una ponencia magistral sobre la posición del proyecto ATLAS dentro de debates más amplios. El profesor Inglebert empezó su análisis historiográfico con los primeros autores que analizaron la Antigüedad tardía, Riegl y Strzygowski (1901), y continuó hasta llegar a la actualidad, a la vez que exponía las amplias problemáticas y debates con los que podíamos encontrarnos en nuestro proyecto. ¿Cómo entendemos la Long Late antiquity? ¿Qué hay sobre el marco geográfico? Su conclusión fue, sin embargo, fortificante: el proyecto ATLAS está muy bien posicionado dentro de los estudios sobre la Antigüedad tardía.

Instantánea del debate posterior a la ponencia de Hervé Inglebert.

El primer grupo de investigación fue el de Poder político y ciudad, e invitaron a Javier Martínez Jiménez de la University of Cambridge. En primer lugar mostró los cambios en los patrones de los asentamientos urbanos de época visigoda, planteando la cuestión “¿qué es una ciudad?”. A continuación se centró en los aspectos políticos que esconden las nuevas fundaciones urbanas y señaló que el control de ciertas áreas pudo ser una de las explicaciones para estas fundaciones. Con estas nuevas ciudades el rey podría haber fomentado la creación de nuevas élites y la adhesión de la población a su figura.

La presentación del grupo estuvo a cargo de Javier Arce y Rubén Olmo, y ofrecieron un análisis sobre los gobernadores provinciales y las ciudades de Hispania. Advirtieron que la evidencia, epigráfica y textual, es bastante exigua y no permite decir mucho acerca de la relación entre la ciudad y el gobernador. Pero pudieron observar que los gobernadores eran especialmente activos en las capitales: Tarraco, Emerita Augusta y Corduba. La pregunta que se plantea es si el estudio de África realmente proporcionaría una imagen distinta.

Javier Arce y Rubén Olmo durante la presentación del grupo Poder político y ciudad.

Acabamos el primer día ‒ o mejor dicho tarde ‒ del coloquio como siempre hacemos en la Warburghaus: con una recepción. Los bocaditos de comida y la bebida sin duda ayudan a los asistentes a conocerse y a iniciar los debates más informales. En este sentido, debemos mencionar a la siempre amable y atenta señora Drößler, la fuerza silenciosa tras toda la comida y bebida en la Warburghaus. Sin su ayuda no habríamos tenido unas pausas tan agradables.

Martes, 25 de enero
Empezamos el día a paso ligero con una excelente visita guiada por la ciudad a cargo del guía turístico local, Dominik Kloss. Comenzamos desde el hotel y de camino hacia el centro paramos en el RomanIslam Center y, más importante aún, en la oficina de ATLAS (también conocida como el despacho de Pieter). Dominik nos explicó el desarrollo de Hamburg desde sus orígenes como centro de intercambio y comercio en la confluencia del Elba y el Alster hasta la construcción del edificio de la universidad en 1911 y la propia fundación de la universidad en 1919.

Fotografía durante nuestra visita guiada por el centro de Hamburg.

La sesión matinal del martes empezó con la Forma de los espacios urbanos. El grupo invitó a Gisella Cantino Wataghin de la Università del Piemonte orientale, quien dedicó su ponencia al análisis del rol de las ciudades, especialmente de aquellas más pequeñas, en el Italia septentrional durante la Antigüedad tardía. Su aproximación a los cambios en los sistemas de asentamiento y estructuras internas, así como a las fortificaciones de las ciudades se adecuó a la perfección con la presentación del grupo.

Nuestra postdoc de ATLAS, Ada Lasheras, y Stefan Ardeleanu estuvieron a cargo de la presentación de nuestro grupo más amplio. Este grupo coordinó realmente su trabajo y mostró un análisis excelente sobre los cambios que pueden observarse en las ciudades tardoantiguas tanto del norte de África como del sur de Hispania. En concreto, se centraron en la reorganización interna de la ciudad y en las nuevas jerarquías que surgieron tras estos cambios.

Ada Lasheras y Stefan Ardeleanu durante la presentación del grupo la Forma de los espacios urbanos.

Tras la visita guiada y esta primera sesión cerramos la mañana relativamente pronto. Era hora de continuar nuestro intercambio científico de una manera más informal en el restaurante y con un buen plato de pasta.

Las sesiones de la tarde empezaron con Julia Sarabia-Bautista, de la Universidad de Alicante, como ponente del grupo Territorio, quien presentó un estudio sobre la ocupación de larga duración en los territorios alrededor de las ciudades del territorio de Alicante. Asimismo, mostró que las áreas periurbanas a menudo presentaban múltiples áreas de ocupación pero en un lapso de tiempo menor, posiblemente moviéndose una vez agotados los recursos. Las áreas periféricas, por su parte, muestran una ocupación con mayor continuidad, lo que plantea la cuestión de si estas zonas son más autárquicas y sostenibles.

Fotografía de la ponencia de Julia Sarabia-Bautista.

Jesús García Sánchez mostró una visión similar sobre el territorio de Emerita, a través de nuevos datos obtenidos mediante prospecciones pero también a través de los datos ya publicados. Nuestro postdoc de ATLAS, Pieter Houten, añadió el estudio de África con el caso de Carthago en base a la información disponible en el artículo de Sycamore y Buchanan. Dado que en ATLAS sólo utilizamos materiales ya publicados, las cuestiones planteadas sobre este tipo de datos son relevantes. El debate posterior sobre cómo definir las categorías fue útil para el análisis de los distintos territorios.

Pieter Houten y Jesús García durante la presentación del grupo Territorio.

Tras un café con un apetitoso pastel hamburgués ‒ la señora Drößler siempre nos cuida ‒ tuvo lugar la última sesión del día: Economía.

Desde la University of Liverpool invitamos a Alfred Hirt para que nos presentara sus estudios sobre la minería en África y la Península Ibérica durante la Antigüedad tardía. Nos habló de la reducción de las actividades mineras y trató de buscar las razones para explicar este declive. El argumento común de que las minas habían quedado agotadas no es cierto, ya que la minería continuó posteriormente. Alfred argumentó que fue una combinación de factores lo que llevó a la disminución del rendimiento de las minas; es decir, que mantener en funcionamiento las minas se hizo demasiado costoso. Parte del problema era la fijación de la mano de obra, de modo que los mineros especializados no podían moverse a nuevas regiones mineras para iniciar allí su actividad. Ruth Pliego, quien asistía al coloquio virtualmente, introdujo al debate la cuestión sobre el origen del oro para las acuñaciones en el noroeste durante la Antigüedad tardía.

Ada Lasheras presentando al ponente Alfred Hirt.

El grupo sobre la economía se centró en tres temas principales: Darío Bernal presentó las actividades haliéuticas en el estrecho de Gibraltar y la interrelación entre Hispania y África. A continuación mostró el trabajo de Jaime Vizcaíno sobre el análisis de la posición económica de Carthago Nova y la reutilización de antiguas áreas públicas como talleres y espacios productivos. Touatia Amraoui continuó la presentación con el examen de las actividades pesqueras en Leptiminus, pero también de los talleres (hornos) para la producción de ánforas para el vino y el aceite de oliva. Sin embargo, los lugares de producción específicos de vino y aceite todavía no se han encontrado. De manera similar, se han localizado los hornos de Carthago pero no se han podido vincular con la producción rural.

Instantánea del debate tras la presentación del grupo Economía.

Cerramos el día con una agradable cena en el restaurante local Broderson, que no puede pasarse por alto en un encuentro en Hamburg. El plato típico, llamado Labskaus, asusta a quienes no saben lo magnífico que es y, de hecho, en cada ocasión hemos conseguido que gane algunos adeptos más.

Miércoles, 26 de enero
Último día, último siglo. La ponencia para el Siglo VIII realizada por Carolina Doménech Belda, de la Universidad de Alicante, se centró en el análisis de las monedas y sellos de los tiempos de la conquista árabe-bereber en el norte de África y en la Península Ibérica. Entre los hallazgos más recientes están los sellos o precintos que se vinculan al pago de tributos y que se localizan especialmente en el sur de Hispania y en la Narbonense. También nos presentó la evolución de las llamadas monedas de conquista, un numerario de oro que presenta cambios lingüísticos pero también en la leyenda. Las primeras acuñaciones islámicas mostraban representaciones de los reyes con una leyenda bilingüe en latín y árabe. Gradualmente el latín fue desapareciendo y las monedas pasaron a ser anicónicas y únicamente incluían la leyenda en árabe. Sin embargo, es interesante observar que las monedas de plata y cobre no tuvieron esta evolución, sino que empezaron directamente en árabe.

Carolina Doménech durante su ponencia.

Sonia Gutiérrez presentó el trabajo del grupo sobre el siglo VIII, “Los tiempos de la conquista (siglos VII-VIII): problemas de registro”, en que se examinó lo que la arqueología nos permite conocer sobre estos siglos “oscuros”. Entre los principales problemas están la correcta datación de los vestigios y la falta de evidencia material, incrementada por la metodología aplicada en las antiguas excavaciones de algunos yacimientos de relevancia. Además, a menudo los materiales se datan antes o después de los siglos de la conquista, lo cual contribuye a esta imagen de un período sin evidencia arqueológica.

Sabine Panzram presentando a Sonia Gutiérrez durante la sesión Siglo VIII.

La primera sesión de la mañana continuó en la sala del café, con unos deliciosos Hamburgian Franzbrötchen. 

En la segunda sesión matutina del último día, el grupo Epigrafía invitó a Isabel Velázquez (Universidad Complutense de Madrid) como ponente, quien presentó una panorámica sobre la epigrafía de época visigoda. Además, también analizó algunos de los problemas de datación de las inscripciones, si bien durante el período visigodo los epígrafes hispanos ofrecen una buena base para datar en base a la paleografía. El trabajo del grupo de epigrafía fue presentado por Javier Arce y Pieter Houten, y se centró en las inscripciones honoríficas del período. El declive de la cultura epigráfica de este tipo de textos es realmente claro y parece sustentar la idea de un hábito epigráfico en decadencia a partir de finales del siglo IV. Sin embargo, la epigrafía funeraria continuó claramente en períodos posteriores y, por tanto, deben tenerse en cuenta otros tipos de textos antes de extraer conclusiones generales.

Pieter Houten y Javier Arce durante la presentación del grupo Epigrafía.

Para comer caminamos hasta nuestro nuevo restaurante italiano favorito, donde comimos tantos antipasti y pasta como quisimos (y pudimos).

La última sesión de nuestro coloquio se dedicó a la Terminología, para la cual invitamos a Álex Corona Encinas, de la Universidad de Navarra, a presentar los aspectos jurídicos de las instituciones municipales en la Antigüedad tardía. Álex analizó la legislación romana durante el reinado de Justiniano, centrándose especialmente en cómo el poder central trató de limitar los privilegios y poderes de la aristocracia local. El grupo de terminología aportó tres perspectivas distintas en tres presentaciones. Así, Stéphanie Guédon nos dio a conocer la realidad urbana en el norte de África y la continuación de las gentes como comunidades urbanas autogobernadas. Rubén Olmo continuó con una panorámica del cambio de terminología en los textos clásicos, donde parece observarse un cambio hacia un uso más general del concepto municipium al comparar a Plinio el Viejo con Amiano Marcelino. Sabine Panzram se centró en la realidad del sistema de asentamientos urbanos cuando se observa el cambio de terminología; por ejemplo, de urbs a civitas y de vicus a castellum o castrum. Además, señaló que en el periodo visigodo la élite urbana pasó a depender más del rey, perdiendo así su posición política dentro de la comunidad.

Stéphanie Guédon, Rubén Olmo y Sabine Panzram durante la presentación del grupo Terminología.

Para cerrar, invitamos a Jean-François Bernard de la Université de Pau et des Pays de l’Adour a que nos presentara los planes futuros de ATLAS: las reconstrucciones 3D. Nos mostró cómo la reconstrucción de las ciudades antiguas está basada en una larga tradición que puede remontarse a la Antigüedad y a artistas como Rafael. Estos dibujos hechos a mano son, de hecho, una magnífica herramienta para visualizar las ciudades antiguas. Las reconstrucciones 3D modernas tienen una base sólida gracias a la arqueología, pero abren debates sobre cómo representar las incertidumbres. Durante el debate, Christoph Eger tuvo la oportunidad de mostrar las reconstrucciones 3D que el LVR Xanten pudo llegar a obtener de su trabajo.

Jean-François Bernard durante su ponencia sobre las reconstrucciones 3D.

El día finalizó con el agradecimiento de Sabine Panzram y Laurent Brassous a todos los asistentes en la Warburghaus y online por sus presentaciones y participaciones en el debate.  Consideraron, con razón, que el coloquio había sido un éxito. Además de estas palabras de agradecimiento, aprovechamos para terminar con una tradición: el debate general dirigido por Javier Arce sobre los beneficios (y los problemas) del trabajo en grupo. Llegó a la conclusión de que lo mejor sería reunirse con mayor regularidad. Estamos deseando volver a reunirnos en el próximo encuentro en La Rochelle en noviembre de 2022!
El día terminó con la cena de despedida en Neumanns. De nuevo un buen lugar para que los participantes disfruten de una buena comida y tengan algo más de tiempo para debatir antes de volver a casa.

Viñeta conclusiva de nuestro coloquio, dibujada por Sonia Gutiérrez.


Categorías
Uncategorized

Una ojeada al 2021

Parece que fue ayer cuando publicamos nuestra primera entrada en este blog, pero lo cierto es que de eso hace prácticamente ¡nueve meses! El tiempo pasa volando cuando te dedicas al estudio de una temática tan apasionante como el fenómeno urbano en la Antigüedad tardía y, aunque parezca increíble, 2021 se acaba en apenas unas semanas. Así que tal vez sea una buena ocasión para mirar atrás y recapitular todo el trabajo que hemos ido desarrollando en ATLAS.

De hecho, desde el inicio del proyecto, el pasado mes de abril, hemos hecho bastante cosa. En esta misma sección de noticias os informamos de la primera reunión que tuvimos, de manera virtual, Sabine, Laurent, Pieter y Ada. La situación sanitaria nos obligó a posponer el encuentro presencial que teníamos previsto con todos los miembros del proyecto en la Casa de Velázquez, pero (alerta, spoiler) afortunadamente pudimos organizarlo unos meses más tarde. Así que el proyecto se puso realmente en marcha con el taller WebSIG que organizamos en la Université de la Rochelle. Fue entonces cuando algunos de los miembros del proyecto tuvimos la oportunidad de conocernos en persona y averiguamos cómo comunicarnos los unos con los otros. Tal y como pudisteis leer en mayo, este encuentro fue una auténtica inmersión lingüística.

A la izquierda, una bonita vista de La Rochelle. A la derecha, Ada, Pieter, Frédéric y Laurent trabajando sobre el WebSIG.

Durante el encuentro en La Rochelle, además de debatir sobre la denominación y categorización de los distintos elementos incluidos en el WebSIG, también establecimos que íbamos a dedicar tres meses para cada caso de estudio. Esto hace un total de 30 meses, lo que nos permitiría acabar justo antes del final del proyecto. Así que como por entonces el proyecto ya llevaba unas semanas en marcha, decidimos estudiar el caso de Baelo Claudia en seis semanas. Ya en aquel momento nos pareció un reto, pero poco sabíamos sobre lo que nos esperaba… Pero conseguimos acabar el estudio de Baelo y, en el proceso, aprendimos cómo manejar el WebSIG.

Imagen de una ficha y captura de pantalla del trabajo realizado sobre Mérida en el WebSIG.

Así, en julio pudimos presentar los avances en nuestra herramienta SIG ante gran parte de los miembros del proyecto. Como os hemos avanzado, el encuentro para el lanzamiento oficial del proyecto en la Casa de Velázquez fue pospuesto y, finalmente, pudimos celebrarlo de manera híbrida los días 12 y 13 de julio. Fue una ocasión fantástica para conocer a más miembros del proyecto y debatir sobre la base de datos, pero también sobre las distintas líneas de estudio dentro del proyecto. De este modo, se crearon varios grupos de investigación que han estado trabajando desde entonces en temáticas concretas y de relevancia para avanzar en el conocimiento de las ciudades tardoantiguas del norte de África y el sur de Hispania.

Fotografías del fantástico patio de la Casa de Velázquez.

Tras un otoño ajetreado yendo de congreso en congreso, y después de unas 15 semanas de trabajo, estamos a punto de finalizar nuestro segundo caso de estudio, Mérida. Ahora podemos confirmar que estudiar Baelo y su historia durante la Antigüedad tardía en seis semanas es mucho más sencillo que estudiar Mérida. De hecho, durante nuestra visita el pasado mes de septiembre, ya pudimos darnos cuenta de que esta ciudad tiene mucho que ofrecer. Sin embargo, la cantidad de datos es bastante abrumadora y, además, sabemos de materiales inéditos que esperamos que sean publicados pronto. En cualquier caso, en enero esperamos poder escribir una breve panorámica sobre esta fantástica ciudad y cerrar este capítulo antes de empezar el siguiente el año que viene.

A la izquierda, Pieter y Sabine durante nuestra visita a Mérida. A la derecha, Sabine presentando el proyecto ATLAS en Alicante.

Lo más probable es que nuestro próximo caso de estudio sea tan desafiante como el de Mérida: Carthago. Con este primer estudio de caso en Túnez, esperamos contar con la ayuda de nuestros colegas para localizar las obras de referencia más importantes y empezar a trabajar. Aunque algo que sin duda nos mantendrá ocupados es nuestra segunda reunión de ATLAS, que tenemos prevista en Hamburgo del 24 al 26 de enero. ¡Estad atentos a nuestras redes sociales (Twitter y Facebook) para más información!

Fotografías de la oficina de Pieter, en Hamburg, y de Ada, en Madrid.


 

Categorías
Uncategorized

Los grupos de investigación de ATLAS

Cuando el pasado mes de julio los miembros de ATLAS nos reunimos para el lanzamiento oficial del proyecto, estuvimos debatiendo sobre las principales líneas del proyecto: vida urbana; ciudad y territorio; red de ciudades. Los debates llevaron a la creación de grupos de investigación que van a centrar su atención en temáticas específicas dentro de las grandes líneas de estudio del proyecto. El proceso de decisión sobre qué grupos debían formarse fue de mutuo acuerdo: un miembro proponía un tema que podía ser de interés y, si éste era secundado por otro miembro, el grupo quedaba formado. Después de esta primera reunión en Madrid, cada miembro podía unirse a uno o más grupos dentro de la lista de grupos de investigación propuesta. Resulta interesante que esto supuso una segunda selección de los grupos, ya que algunos no salieron adelante. Pero al final tenemos varios grupos de investigación que cubren los distintos aspectos de la Antigüedad tardía en la Península Ibérica y el norte de África. Cada grupo refleja bien la diversidad de nuestras líneas de investigación y, además, cada grupo cuenta con especialistas tanto en la Península Ibérica como en el norte de África. De esta manera nos aseguramos de que la perspectiva comparada de nuestro proyecto será parte de estos grupos.

Imagen de nuestra primera reunión en la Casa de Velázquez, el pasado mes de julio.

Los grupos de investigación

Tenemos grupos de investigación dedicados al estudio de temáticas variopintas. Por un lado, el grupo de “Poder político y ciudad” trata aspectos de carácter sociológico. Éste era el caso también del grupo “Religión” pero, finalmente, este equipo se ha unido al enorme grupo de la “Forma de los espacios urbanos”, ya que también se va a centrar en los edificios de representación religiosa dentro de las ciudades. Este gran grupo, que se ha tragado a casi la mitad de los miembros de ATLAS (pero afortunadamente mucha gente se ha unido a dos grupos), va a examinar otros aspectos como el redimensionamientos y la jerarquización topográfica de los centros urbanos tardoantiguos. Éste es uno de los grupos con una clara aproximación arqueológica. Otro grupo arqueológico es el centrado en el territorio, en el que indagarán sobre los territorios de las ciudades desde la perspectiva de la Arqueología del Paisaje. En la arqueología el enfoque económico está siempre presente y, de hecho, tenemos un grupo dedicado a esto que va trabajar sobre los aspectos productivos y las redes comerciales de las ciudades. Una perspectiva más teórica y metodológica la podemos encontrar en los grupos “Terminología” y “Siglo VIII”. Un momento, ¿tenemos un grupo para un siglo en concreto? Pues sí, resulta que este es un siglo realmente complejo de examinar tanto en el norte de África como en la Península Ibérica. Se van a centrar, por tanto, en las dificultades que todavía existen a la hora de definir el registro arqueológico del siglo VIII y en la evolución de las ciudades durante este siglo ‘plenamente post-romano’. El último grupo que queda por mencionar es el dedicado al estudio de la epigrafía en ambas regiones. Así que nos podemos aventurar a decir que con todos estos grupos hemos cubierto todos los grandes temas de la Antigüedad tardía.

Un otoño de congresos y reuniones de grupo

Como ya escribimos, hemos tenido un otoño bastante lleno de congresos que nos ha llevado por todas partes. Parece que todas las instituciones han estado aprovechando este corto período de fronteras abiertas y incidencia razonablemente baja para volver a los congresos (cruzamos los dedos para no encontrarnos con un largo invierno de confinamiento). Pero como nos gusta estar ocupados, esta temporada también hemos aprovechado para trabajar con los grupos de investigación. Como es habitual con grupos distintos, hemos visto que algunos se reúnen frecuentemente y otros trabajan de manera más autónoma. Pero en cualquier caso, con el plazo marcado para la entrega de títulos y resúmenes fijado para la semana pasada, hemos podido ver que todos han estado trabajando duro para que sus temas favoritos despunten en nuestro proyecto. Además, cada grupo ha tenido que empezar a pensar en su presentación sobre el trabajo que tienen en marcha para nuestro próximo encuentro ATLAS.

Fotografía de nuestro próximo lugar de encuentro, la Warburghaus en Hamburg.

El próximo encuentro ATLAS: un pequeño avance

El próximo encuentro del proyecto ATLAS tendrá lugar en Hamburg entre el 24 y el 26 de enero. Seguimos con los dedos cruzados y esperamos que las nuevas regulaciones sanitarias sean exitosas y todavía podamos reunirnos en persona en la Warburghaus en Hamburg. Cada grupo va a presentar su trabajo en marcha sobre su temática específica. La idea detrás de este formato es que podamos ir trabajando hacia la publicación de nuestro monográfico sobre la Antigüedad tardía. Los resultados de los workshops y grupos nos permitirán reflexionar y presentar una publicación actualizada y básica para el estudio de la Antigüedad tardía en el norte de África y la Península Ibérica. Para fomentar el debate, cada grupo va a invitar a un/a ponente especialista dentro del campo de estudio, para presentar las últimas novedades sobre la temática del grupo. De este modo queremos ampliar el tiempo del debate hacia el resto de miembros del proyecto y esperamos avanzar en nuestra investigación sobre la Antigüedad tardía en conjunto.


Categorías
Uncategorized

Un otoño de congresos

Tras un año y medio de congresos virtuales nos encontramos ante un aumento súbito de congresos en “la vida real” después de este primer verano de casi completa normalidad. Así que en este post os vamos a presentar todos los congresos a los que los dos directores y los dos post-docs han asistido o asistirán este otoño. Cabría añadir otros muchos más en los que participan el resto de miembros de ATLAS, pero entonces este sería un post larguísimo y acabaríamos enumerando casi todos los congresos sobre Antigüedad tardía en España, Túnez y más allá.

Dado que las universidades están volviendo ya a las clases presenciales, es de esperar que los académicos también queramos empezar a reunirnos de nuevo – aunque el año pasado se demostró que no necesitamos estar presentes en cada congreso para participar. Es genial poder asistir a seminarios de todo el mundo sin crear una huella de carbono enorme por una sesión de dos horas. El chat de la mayoría de programas nos permite saludar a esas caras conocidas y plantear preguntas cuando la vida dentro de casa hace imposible encender el micrófono. Sin embargo, incluso los encuentros digitales mejor organizados no proporcionan las mismas oportunidades. Irse de la habitación para la pausa del café no puede reemplazar el café de un congreso. Bueno, no nos referimos literalmente al café, con esto de trabajar desde casa seguro que todos hemos mejorado muchísimo nuestras habilidades con esta bebida, llegando a un nivel que no se espera de un cátering universitario. Nos referimos a la pausa en sí, 20 minutos de pausa deambulando y hablando con los distintos participantes (y plantearles esa cuestión que realmente querías preguntar pero que pensaste que no acababa de encajar con la discusión general). Y la presencialidad también ofrece la tranquilidad de poder centrarse completamente en las conferencias, sin todas las distracciones y necesidades del ámbito doméstico.

Parece quedar claro que preferimos los congresos en vivo y en directo, pero si es posible en un formato híbrido para poder seguirlos o participar en aquellos casos en los que no podemos viajar. Y ¿qué congresos hemos tenido desde este mes de octubre? Hemos decidido no incluir una larga y aburrida lista de todos los congresos, sino presentarlos y dividirlos temáticamente en tres ejes: urbanismo, puertos y romanización. Vamos a empezar por ésta última porque se corresponde con los primeros congresos.

La primera conferencia de octubre – o de finales de septiembre más bien – fue el lanzamiento oficial del centro RomanIslam en Hamburg, entre el 29 de septiembre y el 1 de octubre. Aunque este centro lleva en funcionamiento un año, la inauguración del centro como se merece no se había podido celebrar hasta ahora. El congreso de tres días “New Perspectives on Romanization and Islamication” estuvo co-organizado por nuestra directora, Sabine, y reunió presentaciones de varios miembros del proyecto como pudisteis ver aquellos que nos seguís en Twitter: participaron Javier Arce, Darío Bernal-Casasola (online), Philipp von Rummel y Chokri Touihri. Unos días después de esta conferencia sobre romanización e islamización, la temática de la romanización continuó en Xanten con el congreso Toletum: El ejército y la romanización: Hispania y Germania en comparación, del 7 al 9 de octubre. Como este es la reconocida red de investigación germanohispana dirigida por Sabine, ella fue la encargada de inaugurar esta reunión. Y aunque todavía teníamos por delante dos días de congreso, la imagen tan bien escogida por Sabine enseguida nos reveló cómo el ejército romano integraba a la población local.

Fotografía de Sabine durante la presentación en Xanten.

Continuando con el orden cronológico, llegamos a la siguiente temática: urbanismo. Apenas hubo llegado a casa de Xanten, Sabine se fue a París para encontrarse con Laurent y participar en el coloquio de la Université Paris Nanterre “Le phénomène urbain dans l’Antiquité tardive et le haut Moyen Âge”, que tuvo lugar del 11 al 12 de octubre. Nuestros directores fueron invitados a presentar el estado de la cuestión del urbanismo tardoantiguo en la península Ibérica. El coloquio se cerró con las consideraciones de otro miembro del proyecto, Anna Leone. Tras el coloquio de Paris Nanterre tuvimos unos días de descanso, para escribir este post, antes de continuar nuestro tour con las siguientes presentaciones sobre urbanismo.

A partir de aquí, cambiamos a los congresos futuros. En primer lugar tenemos Small Towns: una realidad urbana en la Hispania Romana en el Museo Arqueológico de Alicante (MARQ), entre el 26 y 28 de octubre. El día 26 Pieter presentará la comunicación “Small Towns a través de la epigrafía”. Al día siguiente será el turno de Laurent, quien presentará nuestro primer caso de estudio, Baelo Claudia, como una pequeña ciudad. Una pequeña ciudad que sin duda nos es especialmente querida 😉 El 3 de noviembre Pieter dará una conferencia virtual, titulada “We don’t need a city: Roman civitates without urban centres in Hispania”, en el Institute of Classical Studies dentro de una serie de conferencias en honor a Simon Keay. Las últimas presentaciones sobre urbanismo tendrán lugar a mediados de noviembre en la Universidad de Alicante. Allí Sabine y Pieter participarán en el Workshop: Net Land. Arqueología, redes urbanas y paisajes de asentamientos en la larga duración. Y con esto cerramos la sección de urbanismo para continuar con una parte específica de la ciudad: los puertos.

Laurent y Sabine durante la conferencia de la Université Paris Nanterre.

Es interesante observar que esta parte de la ciudad está bien representada en este otoño de congresos. El 3 de noviembre Ada participará virtualmente en el congreso “Entremares: Emplazamiento, infraestructuras y organización de los puertos romanos” con una comunicación conjunta con Patricia Terrado Ortuño, Anna Gutiérrez Garcia-Moreno y Jordi López Vilar sobre los últimos hallazgos en la Roca Plana, un importante punto de atraque 4dentro del sistema portuario de Tarraco. A continuación viene el coloquio “De Gades a Tanger Med. El futuro de la tradición en el Estrecho de Gibraltar”, co-organizado por Sabine y nuestros colegas de la Casa de Velázquez y la Casa Árabe, desafortunadamente pospuesto en varias ocasiones. Este coloquio tendrá lugar en la Casa Árabe de Madrid, los días 11 y 12 de noviembre y participarán también otros miembros de ATLAS: Darío Bernal Casasola, con una comunicación sobre el papel de Gades en la red comercial del Fretum Gaditanum, y Patrice Cressier, como presidente de mesa en la sesión sobre el período medieval. Finalmente, este otoño de congresos se cierra con el 5º Tarraco Biennal, que en esta edición versará sobre los puertos romanos y la arqueología de los sistemas portuarios y está co-dirigido por Ada, junto a Patricia Terrado Ortuño y Joaquín Ruiz de Arbulo. Nuestra compañera presentará una comunicación sobre el sistema portuario tarraconense a nivel urbano. Pero el congreso también contará con la participación de otro miembro del proyecto, Darío Bernal, y se presentarán otras comunicaciones de interés para ATLAS, como la del sistema portuario de Hispalis y su rol como emporio del Baetis

El workshop Toletum, del 4 al 7 de noviembre, es más difícil de incluir dentro de estas tres temáticas. Sabine organiza una segunda reunión de Toletum este año, destinado específicamente a la participación de investigadores más jóvenes. Así que esto ha llevado a un programa bien diverso e interesante, con sus propios temas de análisis: arqueología y medio ambiente, arqueología del paisaje, historia económica y historia social del poder.

Sin duda este está siendo (y va a ser) un otoño realmente intenso, pero nos alegramos de poder volver a coincidir con muchos de nuestros colegas y debatir en vivo y en directo todos estos temas de gran interés para nuestro proyecto. La islamización, el desarrollo urbano y las redes portuarias son aspectos de importancia en el estudio de nuestras ciudades tardoantiguas y estamos seguros que todos estos congresos nos van a permitir volver con las mentes llenas de nuevas ideas y perspectivas que aplicaremos en nuestros casos de estudio.


Categorías
Uncategorized

Lanzamiento oficial del proyecto en Madrid

Tras tres meses desde el inicio formal de ATLAS, hemos tenido la oportunidad de lanzar oficialmente el proyecto con una reunión semi-presencial en la Casa de Velázquez en Madrid!

Para los que no conozcáis la Casa de Velázquez (CdV), es una institución francesa que promueve el intercambio artístico, cultural y académico entre Francia y España. Su impresionante sede se encuentra en Ciudad Universitaria, la cual mira al valle del río Manzanares. Además de su bonita arquitectura y vistas, también dispone de una impresionante biblioteca. ¡Ha sido realmente un placer poder empezar nuestro proyecto y pasar unos cuantos días trabajando en la CdV!

Algunas fotografías de la Casa de Velázquez: a la izquierda, el impresionante patio; a la derecha, la fantástica biblioteca.

El lanzamiento oficial del proyecto tuvo lugar el lunes 12 y el martes 13 de julio. Doce miembros del proyecto pudieron viajar hasta Madrid, mientras que la otra mitad se unió a la reunión virtualmente. Tras un año de eventos similares en este formato híbrido, la CdV lo tenía todo a punto y pudimos compartir el debate científico con nuestros colegas conectados desde otros puntos de España, Túnez, Alemania, Francia y el Reino Unido. Sin duda, fue una gran oportunidad poder conocer a los miembros del proyecto y debatir distintos aspectos del mismo. El lunes comenzamos con la introducción al proyecto. Sabine y Laurent explicaron los detalles más técnicos y científicos del proyecto, así como la organización en base a nuestras tres sedes: la Casa de Velázquez en Madrid, la Université La Rochelle y la Universität Hamburg. Después, Frédéric presentó el WebSIG a los miembros del proyecto.

Frédéric, en medio de la sala, presentando el WebSIG en la reunión semi-presencial.

Aunque bueno, las cosas no siempre salen como se planean… De hecho, uno de los participantes tuvo algunos problemillas con el micrófono al principio y no había manera de oirlo. ¡Pero nada que no pudiera solucionarse mediante una llamada telefónica a la antigua! En la imagen podéis ver a Laurent aguantando el teléfono con el manos libres para que el resto de participantes en la sala y aquellos conectados virtualmente (los podéis ver abajo a la derecha) pudiéramos oír su intervención.

Simpática fotografía de Laurent en el momento de la llamada.

Al debatir sobre el WebSIG salieron algunas cuestiones sobre la base de datos que nosotros ya nos habíamos planteado. La primera es obvia: ¿cómo conjugamos una realidad compleja con una base de datos estructurada? Si creamos una categoría independiente para cada uno de los edificios no seremos capaces de ver patrones generales ya que habremos introducido cada edificio como un elemento independiente. Así que tenemos que encajar los edificios en alguna categoría. Un buen ejemplo de esta problemática es el ya mencionado xenodochium de Mérida porque se trata del único xenodochium documentado en nuestros diez casos de estudio. ¿Debemos introducirlo en la base de datos como xenodochium? ¿O debemos crear una categoría para “hospital” o “hostal” de manera que sea más sencillo observar el desarrollo de instituciones similares? Continuaremos mejorando nuestra base de datos a medida que vayamos incorporando más datos y encontrándonos con nuevas cuestiones.

Pero en esta reunión no debatimos únicamente sobre la base de datos. Como mencionamos en nuestra cuenta de Twitter, contamos también con una serie de ponencias pensadas para iniciar el debate sobre las distintas líneas de investigación del proyecto. La primera fue a cargo del prof. dr. Javier Arce y se tituló “Los paisajes urbanos en la Antigüedad tardía”. Esta conferencia abrió un interesante debate sobre la terminología que debemos utilizar al analizar la ciudad tardía. A continuación, la prof. dra. Sonia Gutiérrez propuso otro debate interesante a través de su conferencia “La ciudad y el territorio”. Surgieron así preguntas sobre cómo definir el territorio de las ciudades durante la Antigüedad tardía, puesto que algunas desarrollaron varios roles (por ejemplo, como capitales provinciales pero también como capitales de diócesis). Entonces, ¿cómo debemos analizar sus territorios administrativos? La última conferencia, titulada “Un réseau de villes dans l’Antiquité tardive”, estuvo a cargo del prof. dr. Chokri Touihri, quien señaló que debemos examinar nuestros diez casos de estudio dentro de una red de ciudades aún mayor. Sólo de este modo podremos entender verdaderamente el rol y el desarrollo de las ciudad en la Antigüedad tardía. Estas tres interesantes ponencias y los debates surgidos a través de ellas nos encarrilaron para los talleres previstos para cada una de las temáticas.

Imagen de la reunión híbrida durante la conferencia del prof. dr. Chokri Touihri.

Para esta reunión teníamos planeados tres talleres concretos para discutir y organizar distintos grupos de trabajo en consonancia con las tres líneas de investigación principales del proyecto: vidas urbanas; la ciudad y su territorio; y red de ciudades (véase el apartado “Ámbitos de investigación” en esta misma página web). Durante el debate fueron apareciendo varios temas que, dentro de estos ámbitos de estudio, era evidente que necesitaban de mayor atención. Es por ello que decidimos formar varios grupos que trabajarán estos temas concretos de interés para nuestro proyecto y que están en línea con las líneas de investigación mencionadas más arriba.

En definitiva, estamos muy contentos con este primer encuentro de nuestro proyecto. Fue fantástico poder conocer a varios de los miembros en la Casa de Velázquez, y fue todavía mejor poder debatir las principales líneas de estudio con la gran mayoría de colegas gracias a las herramientas digitales. Ya tenemos ganas de nuestro próximo encuentro programado para enero de 2022 en Hamburg. ¡Cruzamos los dedos para que podamos reunirnos todos en un mismo sitio!


 

Categorías
Uncategorized

El primer caso de estudio: progreso en el WegSIG a través de Baelo

El mes pasado nos reunimos en La Rochelle para estrenar nuestra base de datos WebSIG con un taller formativo a cargo del experto en la materia, Frédéric Pouget. Tras cuatro días de formación nos adentramos en las profundidades del WebSIG, aunque por suerte Frédéric ha estado al lado observando y asegurándose de que todo iba bien. La ventaja de utilizar esta herramienta desde el principio es que podemos ir haciendo cambios sobre la marcha. De hecho, al ir usándola hemos descubierto algunos problemillas con las opciones de búsqueda, pero nada que no pueda arreglarse. Otras cuestiones que se han planteado son más de carácter estético, ya que los iconos que tenemos ahora en el WebSIG necesitan una mejora. Por suerte, Sabine conoce a un diseñador realmente paciente… Cada vez que creaba una nueva versión le pedíamos que añadiera o eliminara otros iconos. Nos tememos que habrá creado como una docena de versiones de los iconos… Pero bueno, ¡nuestros mapas van a quedar estupendos!

Captura de pantalla del WebGIS con los nuevos iconos y la ficha de análisis de La Silla del Papa.

Como sabéis, nuestro primer caso de estudio es Baelo Claudia, que es entretenido y también nos plantea varios retos. Uno de ellos es la enorme cantidad de trabajos publicados y accesibles (aquí tenéis un buen ejemplo) que hacen difícil familiarizarse con todos los debates científicos existentes. Asimismo, estudiar el yacimiento desde el despacho nos plantea otro reto. Leer y comprender informes y plantas arqueológicas es mucho más sencillo si se visita el yacimiento en cuestión, pero dadas las circunstancias actuales esto no era una opción. Sin embargo, Baelo Claudia vuelve a ser un buen punto de partida en este sentido ya que gran parte del yacimiento puede ser visitado virtualmente. Por supuesto, no pretendemos decir que esto sea suficiente ni parecido a visitar el yacimiento con nuestros propios ojos; y tampoco se trata de realizar la autopsia de los vestigios arqueológicos para visitar la playa de Bolonia. Pero ante las actuales limitaciones a la hora de viajar, en ocasiones street view ha sido realmente útil. 

Imagen panorámica del yacimiento de Baelo Claudia.

Como habréis visto en nuestro feed de Twitter, hemos estado trabajando sobre la epigrafía de Baelo Claudia. Lamentablemente, no se conocen demasiadas inscripciones tardías. Pero aún así hay algunas realmente interesantes, como la inscripción funeraria dedicada a Sabina. Esta inscripción, datada a inicios del siglo VI, es un ejemplo estupendo para mostrar la existencia de una comunidad cristiana en la ciudad.

Otro trabajo en marcha es la digitalización de los planos arqueológicos de la Baelo tardoantigua. Nuestro objetivo es crear nuevos mapas para cada periodo que permitan mostrar la dinámica de la ciudad en la Antigüedad tardía. Gran parte del trabajo ha consistido en recopilar e investigar los múltiples indicios de ocupación tardoantigua. Cada elemento arqueológico perteneciente a nuestro período de estudio ha sido añadido y descrito en la base de datos. La semana pasada os mostramos el ejemplo del yacimiento de la Silla del Papa.

Por otro lado, hace unos días Laurent, Sabine, Pieter y Ada se reunieron virtualmente para compartir y debatir el trabajo realizado sobre Baelo Claudia. Para entonces gran parte de los vestigios arqueológicos y todos los epigráficos habían sido ya añadidos en el WebSIG y pudimos intercambiar nuestras perspectivas e interpretaciones sobre la evolución de la ciudad tardoantigua. Lo cierto es que es realmente útil poder ver con con una simple ojeada al mapa todos los edificios, infraestructuras urbanas e inscripciones tardoantiguas. Además, al haber incorporado los hallazgos arqueológicos más recientes hemos obtenido una imagen ligeramente distinta a la ofrecida por los estudios precedentes. De hecho, todavía no se ha realizado ningún plano de Baelo en la Antigüedad tardía, cuestión a la que nuestro proyecto pretende poner solución. Esta será una valiosa herramienta para analizar el desarrollo urbano de Baelo, pero también para compararlo con los otros casos de estudio para los cuales también pretendemos crear nuevos planos arqueológicos.

Sabine, Pieter, Laurent y Ada durante la reunión virtual del pasado 22 de junio.

Durante la reunión virtual también comenzamos a abrir el debate sobre la evolución de Baelo en la Antigüedad tardía. Al revisar la bibliografía disponible, hemos advertido que la historiografía tradicional considera que hubo un claro punto de inflexión en la historia de la ciudad, marcado por un terremoto que se data presumiblemente en el siglo III. Además, hay un claro predominio de estudios sobre la ciudad altoimperial, que generalmente hacen hincapié en su supuesta destrucción por dicho terremoto, por lo que se ha creado una suerte de línea divisoria en la investigación y a menudo nos encontramos con que a partir del siglo III la ciudad no se analiza con tanto detalle. Nuestro objetivo es, por tanto, recopilar todas las evidencias disponibles de los siglos III a VIII para comprender y reconstruir su desarrollo a lo largo de estas centurias. Finalmente, escribiremos una reflexión y nuestra interpretación sobre la evolución de Baelo en la Antigüedad tardía en la ficha del WegSIG correspondiente a la ciudad. Se trata de una ficha que permite este tipo de discusiones de carácter más general, en la cual podremos reconsiderar la idea de una ciudad en declive tras el supuesto terremoto del siglo III. 

Y tras dedicar tres meses al estudio de esta “pequeña ciudad” de la costa atlántica, es el momento de empaquetar nuestras maletas y trasladarnos a nuestro siguiente caso de estudio. El día 1 de julio nos refrescaremos en el xenodochium de Masona antes de introducirnos en nuestro siguiente caso de estudio a orillas del río Ana.


Categorías
Uncategorized

Inmersión lingüística y taller WebSIG en La Rochelle

Tal y como os adelantamos en la entrada anterior, este mes de mayo el proyecto ANR-DFG ATLAS tenía prevista la realización de un taller formativo sobre el WebSIG en La Rochelle. Gracias al riguroso cumplimiento de todas las medidas sanitarias pertinentes, este encuentro se ha podido llevar a cabo de manera presencial entre los días 17 y 21 de mayo en la propia universidad de La Rochelle, donde Laurent Brassous recibió a Sabine Panzram, Pieter Houten y Ada Lasheras con gran generosidad en la misma estación de tren. Sin duda, estas jornadas de trabajo han sido un éxito y nos han permitido dar un impulso importante no sólo al WebSIG, sino también al desarrollo del proyecto en general.

El taller formativo se inició el martes 18 con una presentación detallada del funcionamiento de la página WebSIG a cargo de Frédéric Pouget. Asimismo, durante esta presentación Frédéric nos mostró los entresijos de la base de datos de la cual se nutre el WebSIG, que ha sido creada por el equipo de La Rochelle y en cuyo desarrollo también ha colaborado un grupo de estudiantes de la misma universidad – desde luego, ¡han hecho un trabajo excelente! Esta explicación ha resultado fundamental para conocer el gran abanico de posibilidades que ofrecen estas herramientas informáticas, pero también para una óptima incorporación de los datos históricos y arqueológicos. Pero, ¿qué es un WebSIG?

Captura de pantalla de la interfaz web de nuestro SIG hemos empezado por Belo, como podéis ver.

Las siglas SIG se corresponden con el término “Sistema de Información Geográfica”, el cual hace referencia a un conjunto de herramientas informáticas que permiten el almacenamiento, integración y análisis de datos geográficamente referenciados (aquí tenéis un curso organizado por Toletum). Su aplicación en estudios arqueológicos e históricos ha crecido exponencialmente en las últimas décadas, hasta el punto de convertirse en herramientas imprescindibles para gestionar y visualizar grandes volúmenes de datos sobre el plano geográfico, ayudando a su vez a un análisis más complejo de los mismos. En el caso concreto de nuestro proyecto, este SIG se presenta en una interfaz web alojada en el servidor Huma-Num, una infraestructura de investigación para las ciencias humanas desarrollada por el CNRS, el Campus Condorcet y la Université d’Aix-Marseille.

Parte del equipo trabajando durante el taller WebSIG en La Rochelle. De izquierda a derecha: Ada Lasheras, Pieter Houten, Frédéric Pouget y Laurent Brassous.

Pero, por supuesto, en este taller formativo no todo ha sido teoría, ¡también hemos pasado a la práctica! Desde el mismo martes 18 y hasta el viernes 21 hemos ido incorporando toda la información recogida sobre Baelo Claudia que, como sabéis, es el caso de estudio por el que decidimos empezar el pasado mes de abril. Éste ha sido un trabajo colaborativo, en el que también han participado Laurence Tranoy y Stephanie Guédon, y a través del cual hemos ido poniendo en común las distintas cuestiones que iban surgiendo. Así, de manera paralela al debate sobre las denominaciones y organización de los distintos elementos o sobre el modo de presentar la información, hemos podido ir implementando nuevas mejoras en la base de datos y en el propio WebSIG.

Como podéis imaginar, estas jornadas y las conversaciones con nuestros colegas en la universidad de La Rochelle han supuesto una verdadera inmersión lingüística – en especial para Pieter y Ada, que justo empiezan sus andaduras con el francés. Este taller WebSIG ha traído consigo una clase de francés ya que todo se explicó en este idioma, si bien Frédéric fue realmente paciente y nos hablaba despacio y repetía amablemente cuando era necesario. En los momentos en que aún así no acabábamos de comprenderle, Laurent nos proporcionaba una estupenda traducción al castellano. Ésta es de hecho la lengua que todos tenemos en común y es por eso que hemos decidido utilizarla para nuestros debates – aunque para complicar un poquito más la cosa, también hablamos en alemán y en inglés. ¡Está claro que no tenemos problema alguno en representar el multilingüismo de nuestro proyecto! Sin embargo, es cierto que uno de nuestros debates es cómo mostrar el trilingüismo del proyecto en el WebSIG. Pero bueno, esta todavía es una cuestión abierta, así que ya volveremos a ella en otra entrada del blog. Si no os lo queréis perder, podéis seguirnos en esta página o, todavía mejor, podéis hacerlo en nuestra nueva cuenta de Twitter: @ATLAS_cities